El secretario de Estado de Hacienda, Miguel Ferre, ha comparecido en Televisión Española un día después de que el Gobierno diera los detalles sobre su reforma fiscal y se conocieran algunos casos sorprendentes, como el impuesto a los despidos por encima de 2.000 euros por año, el mantenimiento del impuesto de sociedades a la banca o la desgravación por alquiler. Ferre ha asegurado que las indemnizaciones ya estaban siendo gravadas, y que "los trabajadores que se mueven en 20.000 euros al año seguirán estando exentos", ya que "si vemos los datos de 2012, y aunque habrá menos despidos, el 80% de las indemnizaciones seguirían exentas".
El miembro del Gobierno ha querido destacar que "ningún mileurista pagará impuestos (IRPF) a partir del año que viene, y los que ganen por debajo de 30.000 van a ver bajadas muy importantes". Ferre ha incidido en que "todos los españoles van a pagar menos impuestos en 2015" y también ha destacado que "la bajada de impuestos será muy importante para los que tengan familias".
Las grandes que pagan poco
Con respecto a las grandes empresas, que vienen pagando un tipo impositivo del 9% gracias a las múltiples desgravaciones que los sucesivos gobiernos les han ido concediendo, Ferre ha dicho que ahora "se ha diseñado la normativa para que la base imponible sea más alta. Ahora hay ciertos gastos que tienen un impacto fiscal y que antes pagabamos entre todos y que en nuestra opinión no estaban justificados. Este tipo de gastos fiscales no se admiten como desgravaciones para las empresas". Con estos cambios, las grandes compañías españolas se quedan en la misma situaci´no que sus competidoras europeas: "Hasta 2011 se adoptaron una serie de medidas que vaciaban la base imponible y además no respondía a una política económica que viniera bien para el país. No tenían que ver ni con la creación de empleo ni nada. Lo que hemos hecho ha sido rellenar la base imponible", ha concluido el segundo de Hacienda.
