El banco francés Natixis ha rebajado del 6% al 5% su previsión de crecimiento para la economía española este año, después de la revisión del Instituto Nacional de Estadística (INE), al igual que están haciendo otros bancos y analistas.
El INE informó la pasada semana que había recortado el crecimiento estimado del Producto Interior Bruto (PIB) del segundo trimestre del año desde el 2,8%, adelantado a cierre de julio, hasta el 1,1%.
Dicha revisión ha provocado que entidades como Santander y BBVA, que pronosticaban un crecimiento para este año del 6,7% y 6,5%, respectivamente, estén ahora rebajando sus previsiones, como ha publicado este diario.
La crisis de los chips en el sector automovilístico puede afectar también a las previsiones de crecimiento de la economía
A pesar de la corrección del INE, el Gobierno mantiene de momento su previsión de crecimiento para la economía española este año, del 6,5%, y del 7% para 2021.
"Tras la revisión del INE hemos rebajado un punto porcentual nuestra anterior previsión de crecimiento, del 6% al 5%", dice Jesús Castillo, economista para el sur de Europa de Natixis, "y al 5,6% para el año 2022".
El analista de Natixis considera que hay motivos para apostar por un fuerte crecimiento económico en los dos últimos trimestres del año, y mayor en 2022. "Existe un ahorro importante, tienen que ejecutarse las ayudas de los fondos europeos, y el mercado del trabajo se está recuperando", indica. "Pensamos que la situación va a ir mejorando, pero a un ritmo algo menor al previsto anteriormente", concluye.
Dudas y fondos
En opinión de Jesús Castillo, existen algunas dudas sobre la economía española en particular y la evolución de la pandemia en general que afectan a las previsiones al alza sobre el crecimiento del PIB.
Si las vacunas no se mostraran efectivas para posibles mutaciones del virus, las economías volverían a cerrarse
"Hay dudas sobre el comportamiento de la inversión, particularmente en vivienda", expone. "En España vemos un comportamiento distinto en este sentido respecto a países como Francia, Alemania e Italia, donde los flujos de inversión están siendo más fuertes", señala.
"También existen dudas sobre la persistencia de factores que podrían ser coyunturales, como los costes de la energía o las materias primas", apunta. "En particular, para España es importante la crisis de chips y componentes en la industria del automóvil, el sector automovilístico es muy fuerte en España y puede resentirse por esta situación, las esperas para poder adquirir un coche se están alargando", advierte.
"Y habrá que ver cómo gestiona España la llegada de los fondos europeos; una cosa es recibir mucho dinero y otra ejecutar esa ayuda", añade.
En general, subraya el analista de Natixis, la economía española, como las del resto del mundo, estará condicionada por la evolución de la pandemia. "Si las vacunas no se mostraran efectivas para posibles mutaciones del virus, las economías volverían a cerrarse", lamenta.