El sector de las telecomunicaciones se encuentra estancado en ingresos en nuestro país. Los operadores necesitan facturar a toda costa y hay un mercado de donde rascar: el de las segundas viviendas.
Con el verano a la vuelta de la esquina, los 4 millones de segundas viviendas que, según el Instituto Nacional de Estadística (INE), hay en España, son un objetivo claro para las compañías de telecomunicaciones. Muchos de los españoles que se desplazarán en el periodo estival a sus segundas residencias necesitarán conexión a internet. La pandemia hizo que el teletrabajo pasase de ser algo residual a una realidad por completo y ahora son muchas las empresas que mantienen las condiciones de trabajo a distancia entre su plantilla. Los operadores son conscientes de ello.
Se trata de un mercado muy jugoso para las telecos. En España hay un total aproximado de 25 millones de viviendas, también según datos del INE. Con todos los datos sobre la mesa, una de cada seis residencias en nuestro es vacacional o segunda vivienda.
Los precios para internet para las segundas residencias parten de los 16 euros, aunque las condiciones varían en función de la velocidad y los servicios adicionales contratados
El cliente de segundas residencias tienen mucho potencial de cara a las compañías de telecomunicaciones, es una oportunidad para mejorar los números. Sus propietarios son muy interesante porque fluctúan mucho. Un número considerable de ellos contrata internet únicamente para los meses de verano, con lo cual al llegar la siguiente temporada vuelve a haber demanda.
Las ofertas de los operadores
Telefónica, Orange y Vodafone cuentan con tarifas específicas para ese tipo de usuarios. En líneas generales, el precio es mucho mejor para quienes ya son clientes. Las opciones son variadas. Se ofrece fibra óptica, pero también ADSL o conectividad inalámbrica a través de 4G o 5G.
En el caso de Movistar (Telefónica) es posible contratar fibra a partir de 16 euros al mes (los precios dependen de servicios adicionales, como por ejemplo la televisión, o la velocidad contratada, que va de los 10 Mbps a los 300 Mbps). Una oferta en promoción (el usuario se ahorra el alta, que son 50 euros) ni permanencia pero que finaliza a los tres meses, tras los cuales el precio subirá.
Se trata de un mercado muy jugoso para las telecos. En España hay un total de 25 millones de viviendas, según datos del INE. Uno de cada seis pisos en España es segunda residencia
Los precios para internet en segundas residencias parten de los 16 euros, aunque las condiciones varían en función de la velocidad y los servicios adicionales contratados
La oferta para segunda residencia de Orange parte de los 19,95 euros al mes, con velocidades que abarcan desde los 500 Mbps a 1 Gbps y con una permanencia de un año. Vodafone ofrece la posibilidad de contratar internet en la segunda residencia a sus clientes a través de tecnología 4G y 5G mediante bonos recargables por tres euros al mes durante 24 meses (para abonar el router). Para los que no son clientes, la tarifa básica parte de los 24 euros.