Los empresarios con planes de inversión y empleo en España recibirán el permiso de residencia, según los planes que elabora una comisión interministerial liderada por el ministerio de Empleo y a los que ha tenido acceso Vozpópuli. En términos prácticos, eso significa que nombres como el de Sheldon Adelson, el magnate que impulsa Las Vegas Sands, recibirán el permiso de residencia de manera automática. Adelson cumple todos los requisitos que la comisión interministerial ha dibujado sobre el papel: comprar deuda pública española, terrenos o viviendas en España o crear empresas que generen empleo en nuestro país.
Incluso con los requisitos políticos que todavía deben fijarse, Adelson superará todos los mínimos exigibles que maneja a día de hoy esa comisión interministerial liderada por el ministerio de Empleo y en la que también están incluidos los de Economía, Exteriores, Interior y Justicia.
El Gobierno ha insistido en que no modificará la ley para acomodar los intereses del magnate, pero las fuentes que trabajan en el proyecto del Ejecutivo aseguran que tampoco pueden penalizar al empresario.
El plan del Ejecutivo
El Ejecutivo contempla conceder la nacionalidad española a los extranjeros que quepan bajo alguno de los siguientes capítulos:
- Inversión en deuda pública: Quienes compren bonos o letras del Tesoro Público siempre que cumplan requisitos de inversión y permanencia todavía por determinar.
- Creación de empresas y empleo: También se concederá la residencia a quienes creen empresas y empleo en España con un compromiso de “estabilidad en el horizonte temporal”.
- Compra de vivienda: La residencia se otorgaría también a quien adquiera una vivienda por encima de un determinado umbral. Economía apuesta por concederla a quienes adquieran pisos con un valor superior a los 160.000 euros.
- Escuelas de negocio: Se concederá la residencia tanto a profesores como alumnos que se enrolen en determinados programas.
El plan elaborado por la comisión técnica está siendo ya negociado con los ministerios de Interior y Justicia para proceder a las modificaciones legislativas necesarias.
LA SITUACIÓN EN OTROS PAÍSES
Los planes del Ejecutivo están tomando en consideración las referencias de otros países europeos. Según fuentes del Gobierno, se buscan modelos con supuestos tasados como el americano el francés o el portugués y se rechazan fórmulas más discrecionales como la alemana.
- Estados Unidos: Los extranjeros que invierten un mínimo de medio millón de dólares en zonas que el gobierno califica como con “altas tasas de desempleo” y que generen, al menos, 10 puestos de trabajo estables optan a la residencia permanente.
- Francia: El permiso de residencia se concede a quienes crean más de 50 empleos o invierten más de 10 millones de euros en vivienda u otros bienes.
- Portugal. El modelo portugués es casi un calco del que propone el Ejecutivo. Admite la concesión del permiso de residencia permanente bajo los tres supuestos: inversión en deuda pública o transferencia de bienes de más de un millón de euros, compra de viviendas que superen el medio millón de euros y/o creación de más de 30 empleos. El gobierno portugués exige –al igual que pretende hacer el español— un compromiso de inversión de largo plazo que en el caso del gobierno de Lisboa ha quedado fijado en 5 años.
Frente a ese modelo, el Ejecutivo rechaza fórmulas sin criterios tasados, es decir, fórmulas abiertas que permiten un margen de discrecionalidad de cada gobierno. Es el caso de Alemania donde las autoridades pueden interpretar cómo aplicar la norma.
- Alemania: Las directrices del Ejecutivo permiten conceder el permiso de residencia “si hay interés económico” o si hay “una necesidad regional” siempre que tengan “efectos positivos en la economía”. Eso permite al gobierno aceptar diferentes solicitudes con distintos grados de inversión.