Una de las escasas cifras que desgrana Podemos en su programa económico se refiere a la recaudación que lograría su gobierno mediante la imposición de una tasa reducida sobre todo tipo de transacciones financieras. La formación de Pablo Iglesias, que toma los datos de Gestha, calcula que podría obtener 5.000 millones anuales mediante este impuesto a la banca.
Las previsiones de los técnicos del Ministerio de Hacienda se basan en la eliminación de las ventajas fiscales con que actualmente cuentan las operaciones financieras. Esta medida significaría en toda Europa una recaudación anual de 57.000 millones. Para Gestha, y ahora Podemos, esta medida sería "más justa y equitativa" que el aumento de las bases y tipos del IVA por el que abogan tanto el Fondo Monetario Internacional (FMI) como la Comisión Europea (CE).
Podemos plantea, además, realizar una auditoría de todo el sector financiero para conocer la situación patrimonial real de las entidades a las que se han concedido ayudas por valor de unos 130.000 millones de euros. "Se ha levantado la manta para descubrir “las vergüenzas” de las cajas de ahorros pero no se ha hecho lo mismo con los bancos privados porque lo que se ha buscado no ha sido conocer la realidad del sistema sino provocar una demolición programada del sistema de cajas para que así los bancos privados ocupen su franja de mercado como vía de recuperación de su quebranto patrimonial", explica la formación en su documento económico.
El nuevo partido solicita una unión bancaria europea común, que opera desde el pasado 4 de noviembre. Sin embargo, pone en duda el resultado de las pasadas pruebas a las que se ha sometido a la banca europea. "El Banco Central Europeo y la Autoridad Bancaria Europea han realizado recientemente un test de solvencia de la banca que ha permitido asegurar al Presidente Rajoy que la situación de la española es “de libro”. Pero no se puede olvidar que lo primero que ha demostrado en otras ocasiones que no es solvente son estos test de solvencia. Recuérdese como caso más espectacular el realizado, supuestamente con gran éxito, a los bancos irlandeses que poco meses después se declararon en quiebra o el de Bankia", incide.
"Por tanto", coinciden, "se siguen concediendo ayudas a los bancos sin que se sepa realmente si caen en saco roto, sin contraprestación alguna y sin garantía de que vuelva el crédito, que efectivamente no ha vuelto".
A juicio de Podemos, "el extraordinario poder político que históricamente ha tenido y tiene la banca sobre el conjunto de la economía" está taponando el crecimiento del crédito y que éste no llegue a la economía productiva. "La bance hace que las empresas productivas y los consumidores tengan que soportar en España costes asociados al crédito mayores que en otros lugares de Europa, que haya una gran exclusión financiera y una gran asimetría en las relaciones con sus clientes que explica que los españoles hayan sufrido un nivel de estafas y engaños bancarios muy superior al de otros países sin que apenas se hayan depurado penalmente las responsabilidades".