La victoria de Isabel Díaz Ayuso en las elecciones madrileñas ha incrementado el interés de los inversores, en especial nacionales, por la sede del Partido Popular de la calle Génova, según apuntan a Vozpópuli distintas fuentes del mercado.
Lo que transmiten estas fuentes, cercanas a dos de las inmobiliarias más importantes de España, es un cambio en las expectativas del empresariado nacional respecto al edificio, coincidente con el triunfo del PP en la Comunidad de Madrid.
Cuando el presidente del PP, Pablo Casado, anunció su intención de vender Génova 13, allá por el mes de febrero, inversores nacionales consultados por este medio destacaban el "factor político" como un lastre a la hora de interesarse por la, todavía hoy, sede del Partido Popular. "Significa entrar en política", decía uno de estos empresarios. "Ni de coña", afirmaba otro. "En este tipo de proceso de venta puede haber oferentes que pierdan la cabeza", añadía un tercero. Fuentes del mercado recordaban entonces el factor reputacional que implica el hecho de que la Audiencia Nacional investigue la financiación de la reforma del edificio en 2013.
La sede del PP, un 'cromo' de hasta 90 millones
Esas dudas sobre la "transparencia" del proceso han cambiado por otro mensaje: "todo apunta a que sí será limpio y organizado". Un empresario de renombre en el sector destaca, en este sentido, que la venta estará gestionada por una de las Big Four de la consultoría, KPMG, y la mayor gestora de inversiones inmobiliarias en el mundo, CBRE.
"Hay gente que compra cromos, esto es, un edificio, porque es singular, simbólico. Los hay en consejos de compañías importantes, que van y los compran simplemente porque molan. Los sigue habiendo, que igual esperan recibir algún favor a cambio. También algún family office español", afirman fuentes cercanas a otra de las grandes inmobiliarias en España.
Esta misma fuente advierte de que no le sorprendería que algún gran empresario tuviera un "calentón" y "llegara a ofrecer 90 millones" por ese edificio. El consenso es que lo más probable es que el comprador final, nacional o internacional, acabe destinándolo a viviendas de lujo por estar autorizado para uso residencial.
Según sus cálculos, y los de distintas fuentes del mundo de la inversión inmobiliaria, la actual sede del PP, para un uso de oficinas, tendría un precio de entre 70 millones y los 35-37 millones que pagó por el inmueble el propio Partido Popular en 2006. De acuerdo a Idealista, la del PP es la más cara de los partidos a nivel nacional.
"Para oficinas de lujo, igual se tienen que pagar hasta 80 millones en total, ya que el edificio necesitaría alguna reforma según los estándares de oficinas de calidad prime a nivel nacional e internacional", añade. "También es cierto que hay mucho fondo de pensión o soberano internacional, con mucho dinero, que está buscando solo lugares con retornos bajos pero seguros".
El PP necesita rebajar deudas
Es de notar que el valor de tasación recogido por el PP en sus cuentas a cierre del ejercicio 2019 era de 50 millones, que representaban casi la totalidad de los activos no corrientes de la entidad.
A cierre del ejercicio de ese año, el PP tenía 100 millones entre activos corrientes y no corrientes, y un patrimonio neto de 54 millones de euros tras perder 5,7 millones.
Unos números rojos que contrastan con los más de tres millones de euros de beneficio registrados por el partido en 2018, el año en que Mariano Rajoy fue desplazado de la presidencia del Gobierno.
La formación que preside ahora Pablo Casado, acumulaba al cabo de 2019 una deuda total de 45 millones (21 millones a corto plazo), de los cuales once correspondían a deudas con Banesto (Banco Santander) por el propio edificio de Génova 13.
Nueva sede: seis candidatos
Tal y como avanzó Vozpópuli este viernes, el PP ha estudiado la oferta de oficinas en Madrid con una premisa: que la nueva sede estuviese dentro del anillo de la M-30. Con el paso de las semanas se descartaron algunas opciones por su lejanía -caso de los barrios de Las Tablas o Sanchinarro-, pero también ubicaciones cercanas a Génova que había disponibles en la zona de Ventas o Retiro.
Los seis edificios pre-seleccionados por el equipo del secretario general, Teodoro García Egea, están en un radio de unos centenares de metros en torno a la histórica sede nacional. Y con la salvedad de que todas las ubicaciones ofrecidas por la consultora tienen alguna 'pega', a ojos de los populares.
Por ejemplo, en algún caso hay más metros cuadrados de los deseables. Otro emplazamiento se queda un poco corto de espacio y uno de los seleccionados no dispone de todas las plazas de garaje que el partido desearía.
