Los precios de la vivienda ralentizaron su crecimiento en el segundo trimestre del año al 2,1%, el valor más bajo registrado desde comienzos de 2015 en un contexto marcado por la pandemia de coronavirus.
Entre abril y junio, coincidiendo con el confinamiento, los precios de la vivienda nueva crecieron el 4,2%, casi dos puntos por debajo de la subida registrada en el trimestre anterior, según los datos difundidos este martes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
Por su parte, la variación anual de la vivienda de segunda mano descendió casi un punto, hasta el 1,8%.