Las espadas se encuentran en todo lo alto entre los socios del Grupo Prisa. La dueña de El País y la Cadena SER celebrará el lunes su junta ordinaria de socios y su principal accionista, Amber Capital, busca a esta hora apoyos para lograr la caída de su presidente, Javier Monzón.
La clave se encuentra en el punto 5 del orden del día, en el que se pide a los accionistas que voten sobre la continuidad en el Consejo de Administración de varios vocales. Entre ellos, Monzón, que ejerce de presidente no ejecutivo y que cuenta con el apoyo de Banco Santander.
Las fuentes del capital de Prisa consultadas por Vozpópuli dan por supuesto que la candidatura del presidente de Indra será respaldada por Telefónica (9,4%), por Slim (casi el 5%), por el Grupo Herradura Occidente (5%) y por la familia Polanco (7,6%).
Ahora bien, en el bando contrario se encuentra Amber Capital (29,8%) que ha pedido su dimisión del grupo y que sopesa a esta hora la posibilidad de votar en contra de la reelección de Monzón. Su postura podría estar respaldada por otros fondos como Melquart (3%).
El factor político siempre es importante en Prisa, pero las diferencias estriban en la forma de gestionar la compañía. Mientras los fondos de inversión presionan para acelerar operaciones como la venta en Portugal, la refinanciación de la deuda o la operación para sacar a bolsa la parte digital de Santillana (muy difícil en este contexto económico), los accionistas institucionales apuestan por sanear el grupo con 'una mayor prudencia' y, a poder ser, sin deshacerse de activos.
Mientras los fondos presionan para acelerar operaciones como la venta en Portugal, la refinanciación de la deuda, los accionistas institucionales apuestan por sanear el grupo con 'una mayor prudencia'
No ha ayudado a calmar los ánimos el hecho de que la acción se haya desplomado el 60% desde el pasado marzo, tanto por la crisis del coronavirus como por las turbulencias económicas que afectan a Prisa. En estas condiciones, los fondos tienen más difícil rentabilizar su inversión y exigen cambios drásticos.
Las llamadas entre los socios se han sucedido durante los últimos días para tratar de aglutinar los apoyos necesarios de cara a la Junta. A esta hora, todavía hay dudas con respecto a la posición de HSBC (9%) y del accionista catarí International Media Group (5,1%). Ahora bien, como ha ocurrido en anteriores asambleas de socios, se espera que opten por el 'voto fácil'. Y en este momento, pese a las críticas del principal accionista, es el que implica el apoyo a la continuidad en el Consejo de Monzón. También la del propio Joseph Oughourlian, cuya reelección también se decide el lunes.
Modificar el equilibrio de poder
Pase lo que pase, fuentes cercanas a Amber Capital inciden en que el fondo de inversión tratará de modificar en los próximos tiempos el equilibrio de poder que existe en la compañía, por el que los accionistas institucionales respaldan a Monzón y el actual proyecto de gestión de los medios y de Santillana.
El escenario ideal pasaría por un acuerdo entre las partes que ninguna descarta ni rechaza, pero que está lejano, pues sus contactos están gobernados por la desconfianza. Amber Capital apuesta por desligar la gestión de Santillana de la de sus medios de comunicación, pues considera que el factor político que siempre rodea a El País y a la Cadena SER contamina el despegue del negocio de la educación, responsable del 80% del EBITDA.
También pretende introducir nuevos nombres en el Consejo que tengan experiencia en la gestión de medios, como el de José Miguel Contreras, antiguo consejero delegado de La Sexta y con buenas conexiones con Moncloa. En esta relación de caras nuevas también podría entrar Miguel Barroso, exsecretario de Estado de Comunicación con el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero. Eso sí, de momento, los intentos de renovar el órgano de gobierno de Prisa han fracasado.
En caso de que Monzón abandone la presidencia de Prisa -opción muy difícil, según coinciden las fuentes del capital consultadas por Vozpópuli-, el principal accionista apostaría por mantener a Manuel Mirat como consejero delegado y el realizar un proceso de selección de una figura de gestor independiente y profesional, como en 2017 se hizo con Jaime Carvajal (Arcano).
Durante los últimos días, Madrid ha sido un hervidero de rumores y se han barajado todo tipo de escenarios sobre Prisa. Se ha hablado de la ganancia de influencia del viejo PSOE en el grupo, de la recuperación de peso en la compañía por parte de Juan Luis Cebrián e incluso del posible cese de Javier Moreno como director de El País, pese a que fue nombrado hace apenas dos semanas. Tres de los principales socios del grupo ven estas opciones muy remotas, pues -recuerdan- lo importante para quienes han invertido dinero en Prisa (y Amber ha apostado 300 millones de euros a su remontada) es la mejora de su situación financiera y, sobre todo, el despegue de la rama digital de Santillana.