La presentación del índice de precios del alquiler que hizo el Gobierno esta semana no era la medida que prometió a finales de febrero para antes del verano el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos.
El índice de precios presentado esta semana, una herramienta prevista en el decreto de alquileres socialista de marzo de 2019, apunta a permitir a cualquier particular informarse sobre el precio de la renta que se paga en cualquier punto de España ya que, hasta ahora, solo existían datos de portales inmobiliarios y de los precios en oferta (no del cierre de las operaciones).
Los datos del índice (que funcionará como un mapa) se actualizarán anualmente y pondrán en relación rentas y superficies para que se puedan palpar "zonas tensionadas" (las primeras cifras presentadas por el Gobierno apuntan a Madrid, Cataluña y Baleares como las zonas más caras por metro cuadrado). Sus fuentes serán datos de la Agencia Tributaria (las declaraciones de la renta), el Catastro, el Registro de la Propiedad, el Instituto Nacional de Estadística y el Banco de España.
Como tal, es una herramienta que no ha sido puesta en cuestión por el sector inmobiliario. Fuentes del sector de los arrendamientos entre particulares (el 85% del mercado según el Gobierno) reivindican que se trata de una herramienta que buena parte de ellos llevaba incluso tiempo reclamando.
Por el contrario, lo que el conjunto del sector privado ve con malos ojos es un eventual control de precios a partir del Índice por considerarlo una medida que ha "fracasado" donde se ha aplicado: restringiendo la oferta y potenciando la economía sumergida.
Retrasos ya en el Índice
El Ministerio de Fomento, en cualquier caso, llevaba tiempo trabajando en la elaboración del indicador de precios después de que el INE se negara a cumplir con el encargo que le había hecho el propio Gobierno por escrito en enero de 2019, entrometiéndose en sus competencias.
El Grupo de Trabajo diseñado para trabajar en este índice mantuvo tres reuniones antes del verano del año pasado y, aunque inicialmente tenían intención de tenerlo listo en noviembre de 2019, la celebración de elecciones interrumpió este proceso; el coronavirus impidió luego que se presentara a finales de marzo.
El control de precios, en el aire
Al margen de las funcionalidades que acabe aportando la web, lo cierto es que muchos, a un lado y al otro, esperaban (y esperan) que sea un vehículo hacia la implementación del control de los precios que Ábalos anunció un par de semanas antes de que el país entrara en el estado de alarma por el coronavirus. La excusa que esgrimía el PSOE hasta ahora era que no se podían limitar los precios sin conocer su evolución.
Paralelamente, informó este medio, dentro del mundo de la inversión inmobiliaria los hay que piensan que el ala socialista del Gobierno no está realmente convencida de aplicar el control de precios y/o que al menos, "no lo haría por decreto" (lo que agilizaría su entrada en vigor).
Desde Transportes, Movilidad y Agenda Urbana ya no ponen fechas: "Es un compromiso de Legislatura"
"Se está estudiando", dicen fuentes del ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana a este medio sobre si se prevé que la medida se presente este año o no. "Es un compromiso de legislatura", afirman, en referencia al acuerdo de Gobierno del PSOE con Unidas Podemos.
En diciembre, cuando Pedro Sánchez y Pablo Iglesias firmaron el acuerdo de Gobierno de coalición, el PSOE hizo concesiones a Podemos en este asunto, al recoger que "se impulsarían las medidas normativas necesarias para poner techo a las subidas abusivas de precios de alquiler en determinadas zonas de mercado tensionado".
"Se habilitará a las Comunidades Autónomas y/o Ayuntamientos para que a partir del Sistema Estatal de Índices de Referencia de Precios del Alquiler de Vivienda que está desarrollando el Ministerio de Fomento puedan establecer su índice de precios de acuerdo a una metodología objetiva y sujeto a revisión periódica", recogían entonces, en claro guiño a la formación morada.
Podemos y el factor Calviño
El partido de Iglesias siempre ha presionado para que el Gobierno regule los precios de los alquileres, pero ministros del PSOE -como Nadia Calviño- han lanzado en más de una ocasión mensajes en los que parecían descartar esta posibilidad. La situación de crisis económica en la que se adentra España, y una potencial evolución a la baja de los precios del alquiler, podrían reafirmar a la vicepresidenta económica en su opinión.
Así las cosas, y a tenor de la falta de certezas que se traslada ahora desde el ala socialista del Gobierno, hay quien interpreta la presentación del índice de precios de esta semana como una nueva patada hacia adelante del PSOE, un nuevo gesto para contentar a Podemos y a su electorado que en la práctica podría no traducirse en ningún cambio normativo y/o al menos, no en el corto plazo.
