Solaria planea extender su conquista de la Península Ibérica por el resto de Europa. El generador de energía fotovoltaica quiere expandirse durante la próxima década por el Viejo Continente y hacer valer sus acuerdos de venta de energía a largo plazo con gigantes del sector como Shell, Repsol o Statkraft, el gigante energético del Gobierno de Noruega.
“En Europa, la compañía va a seguir una estrategia de crecimiento inorgánico manteniendo los criterios de rentabilidad”, explicaba este lunes la compañía en la actualización de su plan estratégico. En esta senda, la empresa no descarta “la posible adquisición de plataformas de desarrollo y de carteras de proyectos para expandir su presencia en nuevos mercados y llegar construir 4GW para 2030”, añade.
La fotovoltaica de la familia Díaz-Tejeiro cuenta con varias alianzas en el continente que le abrirán las puertas. Además de las tres mencionadas, Solaria cuenta con acuerdos de venta de energía a largo plazo (PPA) con la suiza Alpiq o con la italiana Axpo. También detalla este mismo lunes un acuerdo a diez años de 80 megas con un ‘importante’ operador en España y Portugal por 36 millones, aunque ha preferido no detallar el nombre.
En total, la compañía quiere alcanzar los 1,03 gigas (GW) con los que ha cerrado 2020 a los 18 en 2030. Un despliegue se repartirá en 11 GW en la Península Ibérica, 10 GW en España y 1 GW en Portugal, que seguiría siendo su principal mercado. Para Italia, uno de los países donde tiene presencia, tiene estimado otros 3 GW. Los restantes 4 GW se repartirán por el resto del continente.
Oportunidad de mercado
Su visión es que, a corto plazo, la electrificación de la economía y la llegada del hidrógeno verde a medio plazo provoque un crecimiento sin precedente de las renovables, y especialmente del fotovoltaico que es la solución más barata en Europa.
“Por ello, todo el sector y en particular Solaria tienen una oportunidad excepcional y única para acelerar sus planes estratégicos de aquí a 2030 para hacer realidad la transición energética. Por este motivo, y apoyándose en sus pilares de crecimiento antes mencionados, la compañía eleva su objetivo de instalaciones de 6,2GW para 2025 a 18GW para 2030 con una expansión de la actividad a Europa”, destacan.
Estas expectativas de futuro es lo que ha llevado a esta cotizada, incluido en el Ibex 35 desde octubre, a revalorizarse en el mercado un 248%, mientras que el resto del selectivo ha retrocedido un 15%. Su año también viene marcado por un incremento de la facturación del 54%, hasta los 53,2 millones, y un repunte del beneficio del 27% en 2020, desde los 23,8 millones obtenidos en 2019 hasta los 30,41 millones.