A dos meses de que comience el juicio de Andrea Orcel contra Santander por su fichaje frustrado como consejero delegado del primer banco español -un proceso en el que tendría que declarar la presidenta Ana Botín- el banco italiano Unicredit ha tanteado a Orcel como próximo consejero delegado.
La entidad financiera italiana busca un jefe que reemplace a Jean Pierre Mustier, quien ya comunicó el pasado mes de noviembre que renunciaría al puesto en abril.
El diario Financial Times publicaba este miércoles, aludiendo a uno de "los diez mayores accionistas" de Unicredit, que Orcel era "su candidato preferido". Fuentes conocedoras de las conversaciones han confirmado a este diario que ha habido un acercamiento entre la entidad y el banquero italiano.
El próximo 10 de marzo comienza el juicio de Orcel contra Santander, en el que tendrá que declarar Ana Botín
Sin embargo, indicaba el diario británico en su información del miércoles, para obtener la aprobación "de los reguladores", probablemente Orcel primero "tendría que desentenderse de una demanda de 112 millones de euros contra Santander".
Orcel presentó demanda contra Santander el 27 de mayo de 2019, admitida a trámite el 25 de junio de ese mismo año.
El exbanquero italiano reclama el cumplimiento del contrato, su incorporación al cargo para el que había sido contratado por Santander -consejero delegado- y, subsidiariamente, una indemnización de 112 millones de euros. En su demanda, Orcel incluyó grabaciones de conversaciones mantenidas con Ana Botín.
"Habéis destruido mi carrera, mi reputación y me habéis infligido enormes pérdidas económicas", escribió el 15 de enero de 2019 Andrea Orcel a Jaime Pérez Renovales, secretario del consejo de administración de Santander, cuando el banco anunció que no continuaba con su fichaje, después de haberlo anunciado unos meses antes.
El Juzgado de Primera Instancia número 46 de Madrid fijó, el pasado mes de septiembre, como fecha para inicio del juicio entre Orcel y Santander, el próximo 10 de marzo.
Qué dice el BCE
Este diario se puso ayer en contacto con el Banco Central Europeo para consultar sobre el peso que tendría dicho proceso judicial en la evaluación de Orcel como posible consejero delegado de Unicredit.
El regulador del sistema bancario europeo ha explicado este miércoles a este diario que, al ser un caso concreto, "para evitar especulaciones no hacemos ningún comentario".
El hecho controvertido de que Orcel grabara a Botín sin su consentimiento puede afectar a la evaluación del BCE a su nombramiento en Unicredit
El organismo únicamente se refirió en conversación con Vozpópuli a la 'Guía para la evaluación de la idoneidad', publicada en 2018, documento en el que se repasa el sistema de evaluación por parte del BCE relativo "al nombramiento de todos los miembros de los órganos de dirección de las entidades de crédito significativas sujetas a su supervisión directa".
"Si la conducta personal o profesional de la persona designada hacen dudar de su capacidad para garantizar una gestión sólida y prudente de la entidad de crédito, la entidad supervisada y/o la persona designada deberán informar a la autoridad competente, que evaluará la gravedad de las circunstancias", dice el documento del BCE.
"Si bien la autoridad competente aceptará el fallo de la autoridad judicial, las circunstancias que dieron lugar al procedimiento pueden ser relevantes para determinar si afectan a la reputación de la persona designada, incluso cuando el fallo es favorable", añade la guía de la entidad presidida por Christine Lagarde.
Del contenido recogido aquí puede deducirse que, incluso en el caso de que Orcel ganara el pleito contra Santander, ello no aseguraría el visto bueno del regulador europeo a su designación como ejecutivo de un banco relevante, como Unicredit.
El hecho controvertido de que el exbanquero de UBS grabara a Ana Botín sin su consentimiento, pudiera afectar a esa evaluación del BCE. Por esa razón, la retirada de la demanda de Orcel contra Santander podría allanar el camino hacia la reincorporación de este al sector financiero de primer nivel. Está por ver si el italiano morderá la zanahoria.
