La presidencia irlandesa de la UE y los negociadores de la Eurocámara han logrado un acuerdo final sobre la norma que impone topes a los bonus de los directivos bancarios, pese a la oposición de Reino Unido, que alberga en Londres el principal centro financiero de la UE, según recoge Europa Press.
De acuerdo con esta norma, los bonus de los banqueros no podrán superar la cuantía de la remuneración fija. Sólo si los accionistas del banco lo autorizan, los bonus podrían llegar a un máximo del doble del salario. El objetivo de esta medida es evitar que los banqueros asuman riesgos excesivos a corto plazo, que según Bruselas están en el origen de la crisis financiera.
Durante la recta final de las negociaciones entre la presidencia y la Eurocámara no ha habido ninguna concesión a Londres. Reino Unido reclamaba sustituir los topes por reglas para garantizar que los bonus estén ligados al rendimiento a largo plazo de las entidades y se puedan recuperar en caso de que los resultados sean malos.
Londres alega que la nueva norma hará que aumente la parte fija de los salarios y dificultará que se puedan recuperar los bonus de los banqueros cuando las cosas van mal.
Los topes a los bonus, que está previsto que entren en vigor en 2014, se introducen en la nueva norma sobre requisitos de capital para la banca -que traslada a la legislación comunitaria el acuerdo internacional Basilea III- por exigencia de la Eurocámara.
La legislación exigirá además a los bancos desvelar los beneficios, los impuestos pagados y las subvenciones recibidas de forma desagregada país por país, así como el volumen de negocios y el número de trabajadores. Desde 2014, estos datos deberán enviarse a la Comisión, y a partir de 2015 tendrán que publicarse.