Vodafone incluyó a un menor en los listados de morosos de ASNEF y Badexcug durante un mes, tal y como asegura la resolución del caso publicada recientemente por la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD).
En concreto, permaneció en estas listas entre octubre y noviembre de 2018. Una infracción que el organismo responsable de hacer cumplir las leyes de privacidad ha calificado como "muy grave" y por la cual ha condenado a Vodafone a pagar 120.000 euros, tal y como ha publicado el organismo en la resolución, a la que ha tenido acceso Vozpópuli.
Todo se produjo por un error del padre al dar de alta una línea de teléfono en enero de 2018. En lugar de introducir sus datos personales incluyó los de su hijo, que entonces contaba con 14 años de edad. A las dos semanas de realizar el trámite el denunciante se dio cuenta del error cometido y se puso en contacto con Vodafone para comunicar lo sucedido, dejando constancia de ello.
El padre cometió el error de incluir los datos de su hijo en lugar de los propios al dar de alta una línea, error que comunicó a Vodafone dos semanas después de realizar el trámite
“En septiembre de 2018, mi hijo, menor de edad, recibe una carta de Vodafone España SAU, en la que le comunica que ha contraído con ellos una deuda de 93,77 euros y que en el caso de impago se procederá a su inclusión en una lista de morosos. Me puse en contacto con ellos para comentarles el caso, pero lejos de
hacerme caso siguieron llegando cartas comunicando que o bien se pagaba o sería incluido en un fichero ASNEF. Presenté una reclamación ante la Oficina de Atención al Usuario de Telecomunicaciones, la cual me dio la razón", explicó el padre en la denuncia que interpuso en la AEPD.
Actuación negligente
En el escrito de propuesta de resolución, la agencia asegura que se trata de una actuación "negligente" del operador de telecomunicaciones de origen inglés.
Además, el reclamante recibió una carta fechada de la empresa ISGF Informes Comerciales SL, en la que le reclamaban la deuda en favor de Vodafone. En ella le daban un plazo de diez días para regularizar la situación. De no satisfacerse la cantidad, aseguraban que sus datos personales serían incorporados a los ficheros de solvencia patrimonial y de crédito.
Vodafone incumplió ese plazo de diez días. Sólo cuatro días después, sin cumplir el plazo otorgado al reclamante para el pago de la presunta deuda, sus datos se incorporaron a los ficheros de morosos de Asnef y Badexcug.