El Banco de España cuestiona la subida de las pensiones y del sueldo de los funcionarios aprobados para 2021, ya que prevé que la inflación pueda luego resultar inferior a la prevista como ha ocurrido en otras ocasiones, y considera que hubiera sido preferible subir solamente el salario de los sanitarios, dado su papel en la pandemia de la covid-19.
Así lo ha señalado el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, en su comparecencia de este miércoles en el Congreso de los Diputados para evaluar el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2021.
"Como ya ha sucedido, de hecho, en 2020, en que se ha producido una indiciación de pensiones y salarios públicos del 0,9% que superará a la inflación observada (-0,3%, de acuerdo con la previsión del Banco de España), las propuestas de incremento de los salarios públicos y de las pensiones contempladas en el Proyecto de PGE podrían redundar en un aumento de las compensaciones reales de estos colectivos", ha señalado.
Equivocarse con la inflación dispara el gasto
Este desajuste (prever más inflación que la que luego existe) redunda un incremento del gasto público especialmente cuestionable en una situación en la que "se materializa una importante destrucción de empleo en el conjunto de la economía y un deterioro muy acusado, sin precedentes históricos recientes, en las cuentas públicas", ha apuntado De Cos.
"Dicho esto, en mi opinión, sería más conveniente que, en lugar de adoptar incrementos salariales generalizados para los trabajadores públicos, se valorase la posibilidad de implementar, de acuerdo con criterios objetivos, aumentos más focalizados dentro de este colectivo, por ejemplo, en el personal sanitario", ha dicho.