John Stith Pemberton nace en 1831 en el sureño estado de Georgia, donde se licenció como farmacéutico (con muchos conocimientos de medicina y química) con 19 años. Se casó con 22 y tuvo su primer hijo con 23. Nadie podía imaginar entonces que su apacible vida fuera a cambiar tanto. En 1861 comienza la Guerra Civil estadounidense (conocida como de Secesión) y John sirve como teniente en el ejército confederado (los del sur). En abril de 1865, recibe un profundo corte de sable en el pecho durante una carga de caballería. Los dolores son tan constantes que se vuelve adicto a la morfina, una adicción que quiso vencer creando un jarabe medicinal sustitutivo. Y creo el Dr. Tuggle’s Compound Syrup of Globe Flower,
Este brebaje estaba basado en la Cephalanthus occidentalis, una planta con múltiples usos medicinales (aunque también puede ser tóxica), que tuvo un cierto éxito. Ya viviendo en Atlanta creó una receta en 1885 que contenía extractos de coca y damiana (Turnera difusa) a la que llamó Pemberton’s French Wine Coca. Aunque hay quien dice que copió al químico Angelo Mariani, que en 1863 sacó al mercado el Vino Mariani, una bebida alcohólica revigorizante, a base de vino y hoja de coca macerada. Curiosamente, él seguía siendo adicto a la morfina pero su bebida se volvió muy popular contra “adicciones, depresiones, neurastenias y alcoholismo” (a pesar de contener alcohol).
En 1886 en la ciudad de Atlanta se establece una primitiva “Ley Seca” (en 1920 se promulgó en todo el país), debido a los nocivos efectos del consumo de alcohol en la sociedad. Esto obliga a Pemberton a cambiar la fórmula de nuevo, y para ello pide ayuda a Willis E. Venable. Juntos sustituyen la damiana por nuez de cola (con alto contenido en cafeína) y el vino por jarabe de azúcar. Se estimó que cada vaso de Coca-Cola contenía aproximadamente 9 miligramos de cocaína y se dice que no se eliminó por completo de la fórmula hasta 1929. En la página web de la empresa se declara de manera explícita que ''la Coca-Cola no contiene cocaína u otra sustancia perjudicial''.
Fue el contable de la farmacia de Pemberton, Frank Robinson, el que ideó la marca y el logotipo de Coca-Cola, basándose en sus dos principales ingredientes, y también decidió escribir el nombre en caligrafía Spencerian, un tipo de escritura que en aquel momento era muy popular en Estados Unidos. El rotativo Atlanta Journal fue el que, el 27 de mayo de 1886, anunciaba por primera vez la Coca-Cola, como "la nueva y popular soda". Los carteles colgados en tiendas empezaron a añadir el mensaje "Drink" junto al nombre de "Coca-Cola".
El primer anuncio de Coca-Cola se publicó en un periódico de Atlanta en 1886
De estas primeras fechas de la popular bebida hay muchas versiones y no es posible saber cuál es cierta. Por ejemplo, en principio se vendía para mezclarlo con agua, pero nadie se pone de acuerdo en quién fue el primero que usó agua carbonatada. ¿Fue simple azar, fue un cliente, fue el propio Pemberton, fue incluso por error? Probablemente, nunca lo sabremos. Aunque no es esta la duda que más llama la atención sobre los inicios de Coca Cola.
Como ya pasó con Disney -otro icono empresarial estadounidense-, hay una historia alternativa que sitúa en España el origen. Y no parece tan descabellada esta teoría. En 1880 tres jóvenes emprendedores de Aielo de Malferit (Valencia), llamados Bautista Aparici, Ricardo Sanz y Enrique Ortiz, pusieron en marcha una destilería dedicada a la fabricación de licores, jarabes y horchatas, llegando a ser proveedores de la Casa Real. Uno de sus productos más populares fue el jarabe de Nuez de Kola-Coca, que contenía hojas de coca y nuez de cola. ¿Curioso, verdad?
Pues aún hay algo más sorprendente: en 1885, un año antes que John Stith Pemberton creara su vino de coca, se sabe que Enrique Ortiz estaba en Filadelfia con su producto, haciendo trueque de botellas de su producto a cambio de raíces de viña americana, para así implantarlas en Valencia, ya que una filoxera había devastado los viñedos de media Europa. Recomendaba tomar el refresco de nuez de Kola-Cola diluyendo una parte de jarabe con tres de agua fría. En 1953 Coca-Cola compró los derechos del producto inicial a la fábrica valenciana, que sigue existiendo, si bien comercializa un "Licor de Nuez de Kola-Coca" que nada tiene que ver con el producto original.
Dejando aparte esta razonable sospecha de plagio, lo cierto es que, a pesar del éxito de la bebida, los problemas financieros derivados de su adicción a la morfina llevaron a Pemberton a vender, meses antes de su muerte, a un precio ridículo la fórmula de su bebida. La traspasó a Asa Griggs Candler, un magnate y político estadounidense que, a la postre, sería el fundador de The Coca-Cola Company (en 1892, junto con su hermano John S. Candler, Frank Robinson y otros dos asociados). Pemberton moriría a causa de un cáncer de estómago el 16 de agosto de 1888 a los 57 años de edad, pobre e ignorando la importancia que su bebida adquiriría con el tiempo.
En una caja de seguridad de la empresa Trust Company de Georgia, Estados Unidos, está guardado el secreto de una de las bebidas más consumidas en el mundo. Y según se dice, sólo los directores de esa compañía pueden autorizar que se abra la caja. Por supuesto, es un mito (estaría prohibido si fuera así) que no se conozcan los componentes, el secreto está en las proporciones y el proceso de mezcla.
En una caja de seguridad de la empresa Trust Company de Georgia está guardado el secreto de una de las bebidas más consumidas en el mundo
En 1894, Joseph Biedenharn, dueño de una tienda de dulces de Vicksburg (Mississippi) fue el primero que embotelló la Coca-Cola. En fecha tan temprana como 1897, ya se vendía Coca Cola fuera del país, concretamente en Canadá. Hoy en día, se dice que se vende en todos los países, salvo Cuba -desde 1960- y Corea del Norte. Para evitar la confusión de las diferentes botellas que se usaban en 1915, se celebra un concurso que gana la botella Contour, que se convierte durante décadas en el icono de la marca.
Imitaciones de Coca-Cola
Ya en 1926, la Agencia de detectives Pinkerton, contratada por la dirección, cifraba en 7.000 los productos que imitaban al original. Por eso, es tan importante mantener una imagen de marca única, lo que se convierte en obsesión. Hasta principios de 1950 no se vende en España, unos años después que en el resto de Europa, que la conoce por los soldados estadounidenses que participan en la II Guerra Mundial (momento donde se estrena el formato en lata).
Del histórico éxito de Coca Cola, tanto por sus beneficios como por su expansión -tanto geográfica como en diferentes nuevos negocios y nuevas marcas como Fanta, Sprite, Aquarius, Nordic, Nestea, etc.- poco queda por decir. Baste un dato puramente económico: en 1919 un grupo de inversionistas compró la compañía por 25 millones de dólares (ajustado a la inflación calculo que son unos 450 millones actuales). Lo sacaron a bolsa pocos meses después. Hoy, su capitalización bursátil (después de haber pagado durante años generosos dividendos a los accionistas) supera los 275.000 millones de dólares.
