Joseph Oughourlian (50) no es quizá un nombre muy conocido para el aficionado al fútbol, pero es la nueva moda de la jet empresarial. Presidente desde 2020 del todavía deficitario pero influyente Grupo Prisa (El País, Cadena Ser, As) y, desde este año, accionista bisagra en la mayor tecnológica española, la semipública Indra, este parisino con ascendencia armenia-libanesa próximo al presidente Pedro Sánchez se codea con la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales dependiente del Ejecutivo socialista y con entidades de la talla del Banco Santander, la constructora FCC, la compañía vasca de defensa SAPA Placencia o el gigante americano de inversiones Fidelity. Y todo ello, en su calidad de fundador y titular de un fondo de 1.000 millones en activos asentado en Nueva York y Londres, Amber Capital, con fama de poner el foco en empresas que considera mal gestionadas para luego acabar tomándolas e intereses tanto en la bolsa como en los medios y el fútbol español.
El primer asalto al balompié nacional lo ha dado en un otrora enclave socialista y hasta hace poco propiedad del expresidente de Telefónica, César Alierta: el Real Zaragoza. Allí irrumpió este año Oughourlian para comprar a quien fue su nexo original con Prisa de la mano de un consorcio de inversores americanos propietarios del Inter de Miami, entre ellos, Mark Affolter y Jim Miller, representantes en España del gigante estadounidense de la inversión Ares Management Group. Affolter es desde julio de 2021 consejero en representación del fondo norteamericano en Atlético HoldCo, la sociedad a través de la cual Ares controla cerca de un 30% del Atlético de Madrid.
Como avanzó Vozpópuli, el máximo accionista del club colchonero, Miguel Ángel Gil Marín, ha comenzado a sondear a bancos de inversión y demás entidades financieras de cara a una venta del control tras dos décadas bajo la percepción de que la entidad rojiblanca está próxima sino ya en su techo financiero y precisa nuevos impulsos. La operación de venta en sí de la sociedad anónima deportiva podría rondar los 1.250/1.350 millones de euros sumando equity (750 millones) y deuda.
Fuentes próximas a la operación apuntan a Oughourlian como uno de los actores involucrados, si bien una de ellas lo sitúa como eventual comprador -único o, más probable, en consorcio- y otra, como intermediario de inversores norteamericanos. En este sentido, las fuentes consultadas coinciden en señalar a Ares como principal potencial beneficiario, algo que no debería llamar la atención si se tiene en cuenta la sintonía que mostraron las partes para tomar el Zaragoza. Máxime, si se considera que el fondo americano se ha hecho ya con un derecho de tanteo sobre la mayoría accionarial del heredero de Jesús Gil y Gil.
El Atlético, agobiado por pérdidas
Tampoco se descarta que el francés use sus contactos para apurar una solución financiera intermedia al Aleti, agobiado esta temporada por un roto de 35-50 millones de euros tras la temprana eliminación de Europa. Y ello, tras arrastrar pérdidas operativas por unos 45 millones en la temporada pasada y por unos 100 millones en la 2020-2021, al cabo de la cual Gil Marín tuvo que avalar con su patrimonio personal al club ante terceros con garantías por valor de 134 millones.
A corto plazo, la principal hoja de ruta de la directiva rojiblanca pasa por la venta de jugadores en el mercado invernal, con los nombres de Joao Félix, Rodrigo de Paul, Yannick Carrasco, Thomas Lemar o Cunha como posibles afectados. En el entorno del primer accionista colchonero también se empieza a poner en cuestión al entrenador, Diego Pablo Simeone, si bien como solución a medio plazo, esto es, al final de la temporada.
El contrato del Cholo y la nueva Ciudad Deportiva que quiere dejar como legado Gil Marín conllevan una inversión pendiente de unos 260 millones de euros
El contrato del Cholo y la nueva Ciudad Deportiva que quiere dejar como legado el consejero delegado conllevan una inversión pendiente de unos 260 millones de euros, de los que 200 millones podrían saldarse con la inyección del fondo aliado de la Liga, CVC Capital Partners. Sin embargo, los 60 millones restantes, sumados a los 500-600 millones de deuda del club, abocan a una compleja solución en la que Ares y Oughourlian podrían jugar su papel.
El fondo norteamericano acaba de levantar 3.700 millones de dólares para invertir en deporte. En tanto, el empresario francés sigue sumando expertise en el fútbol, donde irrumpió por primera vez hace más de una década con el Millonarios de Bogotá. Desde la pasada semana, ejerce además como miembro del Consejo de Administración de La Liga francesa -aliada recientemente también con CVC-, tras obtener el respaldo de los clubes galos.
Y ello, en virtud de la condición de Oughourlian de presidente, desde 2018, del Racing Club de Lens. Una aventura en la que el propio Atleti de Gil Marín apoyó inicialmente al empresario francés: lo hizo como socio estratégico de Amber a su entrada en 2016 para luego venderle, un año y medio después, sus acciones en el clásico del fútbol galo.
En 2020, Oughourlian consiguió devolver al Lens a la máxima categoría: se benefició del fin anticipado de la temporada a falta de diez jornadas por la covid. Actualmente, el equipo marcha segundo en el campeonato, solo por detrás del Paris Saint Germain de Kylian Mbappé, Neymar y Lionel Messi que preside el catarí Nasser Al-Khelaifi.
Birmania
Cuando salgan a la luz los enjuagues de Prisa, los de Juan Carlos van a parecer de becario.