La Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme) avisa de que las empresas están activando ya sus planes de contingencia ante la elevada inflación, que reduce sus márgenes empresariales y dificulta la operatividad normal de los negocios. Estos planes pasan, según la patronal, por reducir la producción y ajustar los empleos. El anuncio llega unas horas antes de que el Gobierno apruebe las medidas de ahorro energético que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, avanzó el pasado viernes.
Sánchez no detalló el carácter de esas medidas, que limitarán el consumo energético de negocios y familias y que, según dijo, han sido debatidas con el sector privado. Sin embargo, "las empresas ya han empezado a tomar medidas, como la de ajustar sus horarios ante el aumento del precio de la energía, reestructurar sus planes de producción (incluso con cierres temporales parciales o totales de parte de sus cadenas), y ajustar stocks", avisa Cepyme.
La patronal recuerda que "el encarecimiento de la energía, sumado especialmente al fuerte aumento de los precios de las materias primas, merma la capacidad de producción y de funcionamiento de las pymes españolas". En este sentido, "el incremento generalizado de costes que está sufriendo la empresa española está lastrando su rentabilidad y afectará en el corto y medio plazo al empleo".
La industria se contrae por primera vez desde 2020
Cepyme explica que este ajuste de la actividad empresarial ya se muestra en la demanda convencional de gas, tanto en hogares como en pymes, donde ha caído un 13,8% en junio respecto al mismo mes del año pasado y un 4% en el acumulado del año, según datos de los operadores del sistema. Esta misma tendencia se observa en el consumo de energía eléctrica, lo que revela una contracción de la producción debido al incremento de los costes que está afectando a las compañías.
Este mismo lunes se ha conocido que la actividad manufacturera de España registró en julio la primera contracción desde mayo de 2020 como consecuencia del impacto sobre la demanda de la inflación y de la incertidumbre económica, según refleja el índice de gestores de compra (PMI). La falta de nuevos pedidos tuvo un impacto negativo en la producción, que también mostró la primera contracción desde enero de 2021.
Los sectores más afectados por el incremento de los costes y que están tomando ya medidas en este sentido son los de uso intensivos de gas y electricidad, como la industria papelera, la metalurgia o la siderurgia, entre otros. Sin embargo, se observa también que empresas de menor dimensión en el sector de la hostelería, la industria manufacturera y agroalimentaria, así como la agricultura y la ganadería también están poniendo en marcha planes de contingencia, según Cepyme.
"Las pymes no podrán mantener la situación actual sin que se vea afectada por su propia viabilidad y la creación de puestos de trabajo"
Con todo, la patronal reitera su "preocupación" sobre los efectos de la inflación y alerta de que las pymes no podrán mantener la situación actual sin que se vea afectada por su propia viabilidad y la creación de puestos de trabajo. Por ello, "la Confederación insiste en la necesidad de que el Gobierno tenga en cuenta la situación de las empresas, el incremento de costes y la caída de la rentabilidad al adoptar medidas de política económica, que deberían tener como objetivo prioritario el impulso de la actividad productiva".
El Gobierno aprobará este lunes, en un Consejo de Ministros extraordinario, un paquete de medidas urgentes para cumplir el objetivo de la Unión Europea de recortar un 7% el consumo de gas. El Gobierno ya aprobó el pasado 24 de mayo una serie de medidas de ahorro y eficiencia energética en la administración que servirán de referencia para el nuevo paquete, con el que el Ejecutivo instará también a su aplicación a las empresas y al resto de organismos públicos.
Dicho paquete incluía que, de forma general, los empleados públicos tengan tres días semanales de trabajo a distancia y dos presenciales. Otro grupo de iniciativas incluidas en el plan de la administración que podrían ser replicadas persiguen la racionalización del uso de las instalaciones y los edificios públicos aplicando horarios de apagado y encendido de las instalaciones y de los equipos.
