El empresario, Elon Musk, ha publicado un vídeo este miércoles en el que entra a la sede de Twitter cargado de un lavabo, símbolo de que la compra de esta red social ha llegado a buen puerto.
En su cuenta oficial, el multimillonario ha escrito “Entrando en la sede de Twitter, ¡asimílenlo!”. En su mensaje se incluye la palabra “lavabo” en inglés, a la que hace referencia durante su entrada en clave de humor.
Elon Musk tiene que completar la adquisición de Twitter por 44.000 millones de dólares pactados. El plazo se termina este viernes si quiere evitar ir a un juicio impulsado por la empresa. El jefe de Tesla intentó negociar una rebaja del precio de la operación, pero Twitter la rechazó y, finalmente, Musk se dio por vencido aceptado cerrar la operación en los términos originales.
Unas horas antes, Musk había escrito en su cuenta: “Una cosa bella de Twitter es cómo empodera el periodismo ciudadano, la gente puede diseminar noticias sin un sesgo del establishment”.
