Escrivá toma posesión como gobernador del Banco de España con promesas de "independencia" en medio de la tormenta política

"El buen funcionamiento de las sociedades democráticas requiere de instituciones imparciales que ejerzan poderes delegados bajo mandatos acotados". Es uno de los mensajes que ha lanzado José Luis Escrivá en su toma de posesión como gobernador del Banco de España. En medio de la tormenta política por su nombramiento, el hasta hace pocos días ministro de Pedro Sánchez ha prometido defender "los elevados niveles de autonomía institucional, funcional financiera y legal" que atesora la institución.
Escrivá ha tomado el relevo de Pablo Hernández de Cos, a quien ha alabado en público por lograr "una innegable mejora del prestigio" del Banco de España. Tras reconocer que mantiene con él una "relación fructífera", ha destacado su esfuerzo "para difundir los análisis de esta casa y reforzar su capacidad de influencia en el ámbito europeo e internacional".

Compromiso de "objetividad"

En su discurso inicial, ha ensalzado valores inherentes a la banca central que "guiarán siempre" su trayectoria profesional. A saber, "el rigor, la búsqueda de la objetividad basada en la evidencia y el ejercicio del juicio independiente".
El gobernador ha puesto en valor su paso por la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AiREF), de la que fue su primer presidente por designación del Gobierno de Mariano Rajoy. "Preservar la independencia de la institución de influencias y condicionamientos externos fue, singularmente, un reto desde el primer día", ha señalado.

"El buen funcionamiento de las sociedades democráticas requiere de las instituciones imparciales que ejerzan poderes delegados bajo mandatos acotados", que deben trascender "los ciclos electorales". Para avanzar por esa senda, Escrivá ha anunciado un grupo de trabajo que estará coordinado por Fernando Fernández, el único consejero actual del Banco de España que entró por designación del PP.

Modificación de la Ley de Autonomía del BdE

El objetivo, según el nuevo gobernador, es trabajar en la modificación prevista de la Ley de Autonomía de la institución, tras 30 años de vigencia. Y, al paso, mejorar la transparencia, potenciando "los elementos de apertura, de comunicación con la sociedad, explicando y justificando actividades". Escrivá quiere adoptar "las mejores prácticas y la generación de una cultura institucional que hagan que la transparencia sea un principio inspirador".
El nuevo grupo de trabajo dependerá directamente del Consejo de Gobierno y trabajará "por el refuerzo de la independencia", y por "la transparencia y a rendición de cuentas". "Esta es la forma óptima de rendir cuentas ante la sociedad. El Banco de España ha avanzado mucho en este sendio en las últimas décadas. Pero sigue habiendo margen de mejora y de innovación en nuestro objetivo de ser más transparentes", ha añadido.
En su discurso, rodeado de la cúpula directiva del banco y de numerosos representantes del mundo financiero, Escrivá ha asegurado que hoy es un día "especialmente emotivo". "Regresar al Banco de España supone volver a mi casa, al lugar donde me forjé como economista", ha confesado. Y ha finalizado su discurso con la promesa de avanzar para que la institución "sea una entidad respetada, confiable, imparcial y comprometida con el bienestar de nuestra sociedad".