La contienda entre el sector del taxi y los vehículos de alquiler con conductor (VTC), los que dan servicio a empresas como Uber y Cabify, no se ha terminado. El mediático Real Decreto Ley del ministro de Fomento, José Luis Ábalos, fue convalidado en el Congreso gracias al apoyo de los partidos nacionalistas. Las mismas formaciones que, para disgusto del ministro, votaron acto siguiente que esta norma se tramitase mediante proyecto de ley.
Es decir, los aliados nacionalistas del Gobierno y Podemos, que ocultaron sus cartas hasta el último momento con este tema, dan su visto bueno a que las autonomías y los ayuntamientos puedan regular y limitar los VTC, aunque quieren incluir sus matices. Según fuentes cercanas a la negociación, “esta reacción a que partidos como PNV, ERC o PdeCat reprochan al Gobierno que no contara con ellos para la creación del decreto y, a cambio, el Ejecutivo sólo permitirá las modificaciones a la norma de estas formaciones. Las ideas de Ciudadanos y PP pasarán desapercibidas”.
Esta fuente explica que este respaldo de los nacionalistas vascos y catalanes al decreto será correspondido con “un sí a todo”. Y este todo es, sobre todo, dinero. Ambas formaciones quieren que el Gobierno central sea el responsable de asumir las indemnizaciones que puede generar esta normativa con las VTC. Según los datos de un estudio de Ernst & Young (EY) encargado por la patronal de las VTC, las indemnizaciones en todo el país alcanzaría los 3.800 millones de euros.
Las formaciones nacionalistas reclaman que se incluya por escrito que el Gobierno central asumirá el pago de las indemnizaciones y el blindaje de las competencias autonómicas
Sólo 1.000 millones corresponden a Cataluña, según este estudio. Por eso, ERC y PdeCat quiere que quede por escrito que el Gobierno central asume esta pago. Por otro lado, como indican fuentes cercanas al PdeCat, se solicitará incluir una enmienda para que quede blindadas las competencias de la Generalitat. El PNV prefiere no desvelar su estrategia en estas enmiendas pero, como indican desde la negociación, “buscará incluir la singularidad de las diputaciones forales en este documento”.
Pero no sólo serán los partidos políticos los que aprovechen este nuevo escenario para incluir sus necesidades. El taxi y las VTC también harán ‘lobby’ en este nuevo proceso. Aunque no estarán sólos. La tramitación de mediante proyecto de ley tiene como daño colateral abrir la Ley de Ordenación del Transporte Terrestre (LOTT), es decir, que sectores como transportistas o conductores de autobuses pueden exigir a las formaciones que incluyan enmiendas a su favor.
El taxi mete prisa
La dilatación que provoca la tramitación por proyecto de ley no gusta al sector del taxi. Las diferentes asociaciones del sector reclaman a las administraciones que comiencen a usar sus competencias para regular a los conductores de Uber y Cabify. Fedetaxi, asociación que aglutina al 70% de sector, reclama que establezca un calendario y horarios de servicio para las VTC similar al de los taxis, con libranzas obligatorias o franjas de servicio prohibidas u obligatorias
Además, la asociación pide "prohibir a las VTC de circular, esperar o recoger pasajeros, por los carriles reservados inicialmente a autobuses y taxis; limite total o parcialmente, o, en su defecto, en determinados periodos horarios, el acceso de los vehículos VTC que no dispongan de pegatina ambiental Cero o Eco a determinadas áreas de la ciudad, y en especial al área 'Cero emisiones'", indica en un comunicado.
Si no vemos intención inminente de regular las VTC volverán las movilizaciones
Una reclamas que tienen como principal objetivo a Madrid, tanto Ayuntamiento como Comunidad. Un territorio donde se aglutina la mayor número de taxis y VTCs. Una demanda que podría provocar nuevas movilizaciones si no hay respuesta. “Si no vemos intención inminente de regular las VTC volverán las movilizaciones”, ha dicho Julio Sanz, presidente de Antaxi, asociación que aglutina al resto del sector.
Mientras, Fedetaxi trabaja para que se incluya medidas y propuestas en el proyecto de ley. Entre las medidas propuestas destacan la solicitud de reducción del número mínimo de infracciones para la revocación del permiso a las VTCs, llevándolas a tres o más en lugar de las cinco que están contempladas actualmente. También se solicita un compromiso presupuestario real para poder intensificar las inspecciones para poder así limitar el intrusismo y la competencia desleal. Por lo tanto, el taxi ya tiene toda la maquinaria en marcha tras la aprobación del decreto.