La industria española agudizó su recesión en el mes de octubre, cuando registró una caída del índice PMI manufacturero hasta los 46,8 puntos, por debajo de los 47,7 registrados en septiembre y el nivel más bajo de los últimos seis años y medio.
Según ha divulgado la consultora internacional Markit este lunes, el retroceso se debió "principalmente a un fuerte y acelerado declive de los nuevos pedidos", lo que ha mantenido al PMI manufacturero del país por debajo del umbral de 50 puntos que marca el límite entre el crecimiento y la recesión por quinto mes consecutivo.
"Las condiciones operativas del sector manufacturero español se deterioraron por quinto mes consecutivo en octubre ya que la coyuntura empresarial desafiante tuvo un impacto negativo en las ventas y la producción", explica Markit en una nota de prensa.
Influyó también la incertidumbre económica y política, tanto en el país como en extranjero, lo que provocó una caída de la demanda y de las ventas de exportaciones.
Una nueva embestida de debilidad
De cara a los próximos doce meses, las empresas se mostraron "relativamente pesimistas", ya que esperan que persista la incertidumbre política y tienen una visión negativa de la evolución esperada para la demanda y la producción.
"Octubre resultó ser otro mes desafiante para los fabricantes españoles, ya que las continuas incertidumbre políticas, tanto en el país como en el extranjero, afectaron considerablemente el comportamiento del sector (...) las ventas cayeron fuertemente y las empresas tuvieron que reducir intensamente la producción", resume Paul Smith, director de Economía de Markit.
Este experto concluye que "las empresas parecen estar preparándose para afrontar otra embestida de debilidad de la producción y de las ventas, que esperan observar en los próximos doce meses".
