La inflación general vuelve a subir en abril hasta el 4,1% tras el 'respiro' de marzo, cuando bajó al 3,3% por el efecto base (los precios ya subieron un 9,8% en marzo de 2022 por la guerra en Ucrania). Por su parte, la subyacente (menos volátil al excluir los precios de la energía y de los alimentos frescos) baja al 6,6%, según el avance del Índice de Precios de Consumo (IPC) que elabora el Instituto Nacional Estadística (INE).
Hay que tener en cuenta que al ser la inflación una tasa anual y ser el 2022 un año de grandes subidas de precios, a partir de ahora las tasas estarán afectadas por lo que llamamos "efecto base". Ya ocurrió en marzo, cuando la inflación general bajó hasta el 3,3% (frente al 6% de febrero) al compararse con un mes en el que subieron con fuerza los precios.
Como la inflación subyacente ha ido por detrás de la general, este mes el efecto ha sido más positivo para la primera, al comparar con abril de 2022, cuando ésta repuntó un 4,4% (un punto más que en marzo). En el caso de la general ha ocurrido lo contrario. En abril del año pasado los precios disminuyeron dos décimas respecto al mes anterior y la tasa anual también bajó, pasando del 9,8% de marzo al 8,3%.
Por su parte, el Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital que dirige Nadia Calviño ha destacado que "la inflación subyacente baja casi un punto en abril por la ralentización del precio de los alimentos y la general es la mitad de la registrada un año antes".
Además, inciden en que "tras la importante bajada de la inflación de dos puntos y medio en marzo, tal y como estaba previsto, la inflación general ha repuntado por el efecto base al compararse con el mes en el que se introdujo la bonificación a los carburantes y el resto de medidas del decreto del 29 de marzo de 2022".
El INE explica que la evolución de la inflación en abril responde a que "el descenso de los precios de la electricidad es menor que el registrado en abril de 2022, y al aumento de los carburantes, que bajaron en abril del año anterior. En sentido contrario destaca el comportamiento de los alimentos y bebidas no alcohólicas, cuyos precios aumentan menos este mes que en abril de 2022".
Los precios no bajan
La pregunta, en este contexto, es: ¿están bajando realmente los precios? La respuesta es no, según el IPC del INE. En el último mes, entre abril y marzo, los precios de todos los los bienes y servicios que componen el IPC subieron, de media, un 0,6%. Y si se excluyen los precios energéticos y de alimentos frescos, la subida ha sido aún mayor, del 1%.
De hecho, estas subidas rompen los signos de desaceleración apreciados en marzo, cuando los precios subieron un 0,4% respecto a febrero, mientras que en febrero lo hicieron un 0,9%.
Además, veníamos de meses de estancamiento o incluso ligeros descensos, así que la evolución del último trimestre no ha sido positiva. Menos aún si nos fijamos sólo en la subyacente, donde los precios encadenan dos meses de subidas consecutivas del 0,7% y ahora del 1%.
Por tanto, en este escenario de volatilidad es importante poner el foco en el propio índice para ver en qué punto están realmente los precios y si siguen o no subiendo mes a mes. Y el resultado es que los precios se sitúan en niveles récord.
