Hace una semana Orange vendía 1.500 antenas a un precio de 260 millones de euros. Telefónica tiene el cartel de 'en venta' puesto sobre sus 50.000 emplazamientos, mientras Vodafone ha creado una empresa denominada TowerCo para deshacerse de sus 62.000 antenas. MásMóvil, cuarto en discordia, ha llegado a un acuerdo con Macquarie y Aberdeen para vender 940.000 accesos de fibra óptica por 218,5 millones de euros.
La razón de esta tendencia se encuentra en varios factores. Quizá el principal de ellos, como puede suponerse, sea el dinero. Las 'telecos' se encuentran en un momento complicado. La presión de las compañías low cost ha estancado o recortado su negocio en un momento en el que están en juego grandes inversiones en red.
La tecnología 5G, la compra de espectro, es quizá el desembolso más fuerte que ya afrontan los operadores de telecomunicaciones. Telefónica, por citar al más grande de los operadores, se ha dejado 2.000 millones de euros comprando parte de espacio radioeléctrico en Reino Unido y Alemania. En España la propia Telefónica, más Orange, Vodafone y MásMóvil, desembolsaron 1.400 millones de euros en la primera subasta de espectro 5G celebrada en nuestro país este verano. Con más licitaciones pendientes en Europa -en España la de 700MHz se celebrará a principios de año- las compañías de telecomunicaciones son conscientes de que es necesario disponer de caja, de liquidez.
Las próximas subastas de espectro obligan a los operadores a tener liquidez. La venta de antenas, un activo no estratégico para las 'telecos', es un vehículo muy apropiado para conseguirlo
La mejor manera de conseguir dinero rápido es vender. Si además hay un buen comprador, mejor que mejor. Cellnex, el operador de infraestructuras con capital mayoritario italiano lleva un tiempo adquiriendo torres de telecomunicaciones. Su política es crecer a base de compras. Adquieren las antenas de telefonía móvil a los operadores y luego se las alquilan. "Cellnex paga muy bien, es complicado resistirse", explican fuentes de los operadores en referencia a la heredera de Abertis Telecom.
La importancia de las antenas para los operadores
"La venta de antenas tiene toda la lógica para los operadores. Es algo que no sólo sucede en España, sino también en Europa. Son activos no estratégicos para la compañía. Lo importante es el espectro, no tanto el emplazamiento. En un momento en el que nos hace falta tener caja y con el sector prácticamente estancado, son una opción perfecta para hacer dinero rápido", aseguran las mismas fuentes.
Los operadores han hecho de la necesidad virtud, algo que no se esconde desde las 'telecos' españolas. "Nunca hemos estado tan faltos de liquidez. El low cost ha lanzado el mercado hacia abajo pero las inversiones, sin embargo, no paran de subir; por eso vendemos infraestructuras".
"Que un operador sea propietario de las torres no tiene sentido. Sí lo tiene que lo sea de los elementos radiantes. Eso, sumado a las condiciones del mercado, hace de las antenas un activo fácilmente convertible en dinero", continúan desde las 'telecos'.
Además, también supone un ahorro de costes. "Quien compra las antenas se encarga del mantenimiento y reparación de las mismas, lo que supone, a pesar del alquiler que nos toca pagar por su utilización cuando se venden a los gestores de infraestructuras, un ahorro. Y no sólo económico. Gestionar los emplazamientos es engorroso", concluyen.