Las jugosas plusvalías obtenidas por Dragados, filial constructora de ACS, con la venta de unos terrenos con los que el Ayuntamiento de Madrid compensó a la empresa por el fin anticipado de una concesión no han pasado desapercibidas en el Consistorio. Tanto es así que la corporación municipal deberá dar explicaciones este miércoles a preguntas tanto del PSOE como de Ciudadanos, grupos que en su día fueron muy críticos con el esquema elegido por el Ayuntamiento para resolver la concesión.
El pasado diciembre, Dragados obtuvo cerca de 130 millones de euros por dos parcelas situadas en el distrito madrileño de Tetuán y calificadas para la edificación de sendas torres de viviendas. Los suelos formaban parte de la compensación recibida por parte del Ayuntamiento de Madrid como pago por las obras de urbanización en la zona en torno al Paseo de la Dirección cuya concesión, que había logrado la filial de ACS en 2007, había sido resuelta de forma anticipada.
La operación, avanzada por Vozpópuli, suponía para Dragados sacar un rendimiento récord a los terrenos en cuestión, toda vez que los había recibido poco más de un año antes con una valoración por parte del Ayuntamiento de Madrid de apenas 90 millones de euros. Es decir, un poco más de 12 meses, el grupo presidido por Florentino Pérez ha logrado una plusvalía del 44%.
Los detalles de la operación han levantado en armas a la oposición de Ahora Madrid, la formación liderada por la alcaldesa Manuela Carmena, en el Ayuntamiento, como prueba el hecho de que en la próxima comisión de Desarrollo Urbano Sostenible se formularán al delegado del área, José Manuel Calvo, dos preguntas sobre este asunto, algo que no suele ser habitual.
¿Pérdida patrimonial?
En concreto, Ciudadanos interrogará al delegado sobre una presunta pérdida patrimonial por parte del Ayuntamiento "por el acuerdo de entrega de suelo alcanzado en el paseo de la Dirección respecto del precio de venta de este suelo obtenido por Dragados", según figura en el orden del día de la comisión.
Sin embargo, no será la única pregunta sobre esta materia, ya que la portavoz del Grupo Municipal Socialista también requerirá conocer una valoración del Ayuntamiento sobre "los precios de venta de dos parceles destinadas a vivienda libre en el paseo de la Dirección, en relación con la valoración contenida en la liquidación realizada con la empresa Dragados hace un año".
Ambas formaciones políticas fueron muy críticas en su día con el acuerdo alcanzado por el Consistorio con Dragados para la resolución de la concesión, en la que la compañía incumplió en numerosas ocasiones los compromisos contemplados en la misma. Finalmente, el Ayuntamiento accedió a pagar a Dragados con suelo en la zona, tal y como estaba previsto en el contrato inicial (que fue modificado varias veces a lo largo de los años a petición de la compañía, bajo amenazas de paralizar las obras que ejecutó también en reiteradas ocasiones hasta conseguir sus objetivos).
La compensación se realizó en función de los trabajos que sí llegaron a ser realizados por Dragados. Las certificaciones de obra sumaban unos 130 millones de euros, con lo que el Ayuntamiento entregó a Dragados parcelas valoradas en este montante. Sin embargo, la reciente operación en el mercado de la filial de ACS, con el fondo suizo Stoneweg parece poner en duda que la valoración de los antiguos suelos municipales fuera del todo ajustada.
Más suelos por vender
Dragados recibió un total de siete parcelas. Entre ellas, las de más valor son las que vendió en diciembre, con una superficie de 20.300 metros cuadrados y valoradas en algo más de 45 millones de euros cada una en el acuerdo con el Ayuntamiento. SU calificación es para uso de vivienda libre.
Con la operación, la empresa ya ha visto compensado todo el gasto que realizó en la concesión, con la particularidad de que aún le queda terreno por vender. En concreto otras cuatro parcelas, valoradas en unos 35 millones de euros, aunque su calificación es de vivienda protegida, por lo que el margen de beneficio será menor.
No obstante, como la venta de los terrenos más valiosos ha servido para amortizar el gasto total en la concesión, todo lo que obtenga la filial de ACS por los terrenos que le quedan se lo podrá apuntar como beneficio. Otra posibilidad es que sea la propia compañía la que decida promover el desarrollo de los suelos que le restan, aprovechando el momento alcista que atraviesa el mercado inmobiliario.
Tanto PSOE como Ciudadanos criticaron en su día el acuerdo de resolución de la concesión por entender que beneficiaba a Dragados y no terminaba de resolver el problema de un colectivo de vecinos de la zona, afectados por las expropiaciones que en su día se realizaron para llevar a cabo la reurbanización.
Para muchos de ellos, el dinero recibido por la expropiación de su vivienda no era suficiente para cancelar la hipoteca y asumir la compra de los pisos de realojo que, además, no estaban construidos a tiempo por los numerosos retrasos en las obras. Para Dragados ha resultado más sencillo (y, sobre todo, rentable) salir del problema.