El traspaso de los Rodalies a Cataluña como parte de las negociaciones para que Pedro Sánchez pueda formar Gobierno es un éxito para la Generalitat, pero ha sentado como un jarro de agua fría a parte del sector de los maquinistas.

Algunos de ellos, integrados en empresas como Ouigo o Iryo, esperaban para dar el salto a Renfe, corporación que ofrece en líneas generales mejores condiciones laborales, pero algunos de ellos ha decidido dejar en espera estos planes.

El motivo es la incertidumbre que atisban en el traspaso de competencias. Aunque es cierto que Óscar Puente, nuevo titular de la cartera de Transportes, logró abortar los paros aprobados en protesta por parte de los sindicatos de Renfe -querían se aclarase cuanto antes las condiciones en que quedaría la plantilla-, las dudas están ahí.

"El comunicado con el que se canceló la huelga es muy ambiguo. No termina de aclarar cosas como qué pasará con los nuevos maquinistas, si serán contratados por Rodalies o no y las condiciones que tendrán", explica un maquinista consultado por Vozpópuli. Otro de estos profesionales añade que "tampoco si se mantendrán las condiciones de los maquinistas que opten por ir a trabajar a Cataluña. Si sus sueldos se respetarán para siempre, si tendrán la posibilidad de moverse a otras regiones... El desbloqueo de la huelga horas antes de que se produjera es una patada hacia adelante. Renfe ya no será lo que era".

Unos 15.000 trabajadores estaban llamados a realizar los paros, convocados para cinco días: el pasado viernes 24 de noviembre, el 30 de noviembre y el 1, 4 y 5 de diciembre, coincidiendo con uno de los puentes más largos y con más movimiento de todo el año.

Renfe se reserva el derecho, cuando nuevos maquinistas entran en su plantilla, de enviarlos a trabajar allí donde más se necesiten. Cataluña es una de las regiones con más demanda en este sentido. El alto precio de la vida en la región hace que haya mucha rotación entre los maquinistas

A pesar de la opinión de muchos maquinistas, los comités de Adif y Renfe consideran que la negociación fue un éxito. "Las negociaciones han llegado a buen puerto, posibilitando el acuerdo de desconvocatoria de huelga, ya que desde el Ministerio han atendido las reivindicaciones de dichos Comités. La respuesta a las demandas que han motivado el conflicto se ha recogido en un acuerdo firmado entre todas las partes, garantizando la integridad del Grupo Renfe y Adif, manteniendo sus plantillas y su operación, tanto para el proceso de Rodalies de Catalunya como de Renfe Mercancías", explicaron en un comunicado, en el que añadieron que "las ferroviarias y los ferroviarios nos hemos unido de forma ejemplar y hemos conseguido superar una situación que no iba a suponer una mejora para la ciudadanía, pero sí un gran perjuicio para todas y todos nosotros".

Más allá de los Rodalies: el coste de vivir en Cataluña

Otro de los problemas al que apunta el sector de los maquinistas es el coste de la vida en Cataluña. "Hablamos de una de las zonas más caras de España. Para alquien que no sea de allí, y no tenga vivienda, los gastos se disparan. Si a eso se suma la incertidumbre de lo que pasará con el traspaso de los Rodalies, es normal que muchos maquinistas que trabajan en empresas como Iryo o Ouigo prefieran quedarse en ellas que arriesgarse a ir a Renfe", concluyen.

Renfe se reserva el derecho, cuando nuevos maquinistas entran en su plantilla, de enviarlos a trabajar allí donde más se necesiten. Y Cataluña es una de las regiones con más demanda en este sentido, precisamente porque el alto precio de la vida hace que haya una rotación muy grande hacia regiones más económicas. "No es lo mismo vivir con el mismo sueldo en la ciudad condal que, por ejemplo, en Málaga o Córdoba", apuntan las fuentes consultadas por este diario.

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