Luis Rubiales acordó el traslado de la Supercopa a Arabia Saudí sin pedir legitimidad a la Asamblea de la Federación; un extremo que fuentes críticas con el presidente consideran que formó parte de la "falta de transparencia" y la "arbitrariedad" con la que se llevaron a cabo las negociaciones con los saudíes y la productora intermediaria, Kosmos, administrada por el futbolista Gerard Piqué.
El presidente de la Federación firmó el polémico contrato inicial, de tres años prorrogables por otros tres por hasta 40 millones anuales supeditados a una comisión de cuatro millones anuales para Kosmos, sin haber sometido a votación de la Asamblea los términos de la negociación. Fuentes críticas con Rubiales denuncian a este medio que esa decisión fue sintomática del oscurantismo y las prisas en sus negociaciones con Kosmos y los saudíes de cara al resto de "órganos" de la RFEF. En este sentido, remarcan que a día de hoy no se han hecho oficiales las cifras del contrato ni los baremos de los criterios en virtud de los cuales se repartirá el dinero entre los clubes. En su rueda de prensa de este miércoles, el presidente ha mencionado la cifra total, de 400 millones en diez años, pero no ha entrado en más detalles alegando las cláusulas de confidencialidad del contrato con los saudíes.
Según ha publicado El Confidencial, Rubiales llegó a ocultar información sobre sus relaciones con Kosmos a la Comisión de Ética, a la que vetó un informe que se oponía al traslado a Arabia Saudí por las políticas de ese país respecto a las mujeres y los homosexuales. El presidente firmó en 2019 el acuerdo para el traslado, exigiendo a los saudíes que paguen una comisión anual de éxito de cuatro millones de euros a la empresa dirigida por el futbolista del Barça Gerard Piqué.
"Las personas sujetas al presente Código no aceptarán, entregarán, ofrecerán, prometerán, pedirán o solicitarán comisiones, en su beneficio o en el de terceros, por negociar o cerrar acuerdos u otras transacciones en relación con sus funciones, salvo que esté así establecido en un contrato legítimo"Artículo 24 del Código Ético de la RFEF
Con anterioridad a la firma, el jugador había planteado a Rubiales un acuerdo beneficioso para la RFEF en caso de trasladar la Copa a Arabia Saudí y que se paguen "ocho kilos al Madrid y ocho al Barça", después de que el presidente ofreciera al jugador un "margen de negocio" para los blaugrana si ponían a disposición el Camp Nou. El acuerdo final se firmó en septiembre de 2019.
Rubiales pidió legitimidad a la Asamblea tiempo después de la firma
A la Asamblea, en cuanto el órgano superior de gobierno y representación de la RFEF, corresponden necesariamente cuestiones como "la aprobación del presupuesto" anual de la Federación, "regular y modificar las competiciones oficiales, su sistema y forma" y "la aprobación del calendario deportivo"; también las cuestiones que el presidente estime oportuno trasladarle. Entre sus 140 miembros están representados los presidentes de las diecinueve Federaciones de ámbito autonómico integradas en la RFEF y los miembros electos de los estamentos de clubes, futbolistas, árbitros y entrenadores.
El presidente, por estatuto, puede asumir "funciones no encomendadas específicamente a la Asamblea General", liderando la gestión de la RFEF de la mano de la Junta Directiva. "No hay ninguna obligación ni legal, ni reglamentaria ni estatutaria ni similar que obligue a llevar este acuerdo (el del traslado de la Supercopa a Arabia) a la Asamblea", han explicado fuentes cercanas al presidente de la RFEF, quien sin embargo, sí llevó a la Asamblea su potestad para extender los términos económicos del acuerdo con los saudíes con posterioridad a su firma.
En concreto, el 17 de diciembre de 2020, casi un año después de la primera edición del certamen celebrada en Arabia, el presidente sometió a votación de la Asamblea "mandatar al presidente de la RFEF para una negociación de las condiciones del acuerdo firmado en su día entre la Real Federación y el colaborador local de la Supercopa en Arabia Saudí con el objeto de mantener el justo equilibrio económico-patrimonial entre ambas partes a los efectos de dar una respuesta suficiente al cumplimiento de las obligaciones recíprocas incluyendo la posibilidad de revisar la vigencia temporal del mismo de manera que se consiga ese objetivo".
Se decidió dar la máxima transparencia (al acuerdo con Arabia Saudí) en la Asamblea y se solicitó su voto, sin más"
La RFEF había alcanzado un preacuerdo con los saudíes que implicaba que estos renunciaban a albergar la edición 2021 del torneo -mediada por la pandemia- a cambio de una extensión del vínculo. El presidente Rubiales sometió así "a la consideración de la Asamblea que se le mandate para negociar el citado acuerdo firmado con Arabia Saudí y extender su vigencia, para así garantizar la continuidad" de la aportación de los saudíes a la Federación.
Esa propuesta, que redundó en la extensión del vínculo con Arabia Saudí hasta 2029, se saldó con 83 votos a favor y cinco abstenciones. "Se decidió dar la máxima transparencia en la Asamblea y se solicitó su voto sin más", añaden desde la RFEF, sobre por qué se solicitó esa votación del 17 de diciembre de 2020 sobre el acuerdo firmado un año antes y no con anterioridad a la firma.
La anterior ocasión en que el presidente había planteado el asunto de la Supercopa como un punto en el orden del día de la Asamblea data del 29 de abril de 2019. Entonces, se sometió a votación el nuevo "modelo de competición" de cuatro equipos y su encaje en el calendario, con un resultado de 94 votos a favor, dos en contra y dos abstenciones, pero sin referencias por escrito a la futura sede y/o sus términos económicos. Tampoco se dieron cifras en el acta de la votación del presupuesto 2020 de la Federación del 16 de diciembre de 2019, ya con el contrato firmado.