Manuela Carmena, alcaldesa de Madrid, organizó este domingo su primer San Isidro y ha dejado claramente su marca en los actos.
Las medallas de la ciudad fueron entregadas en una ceremonia más sencilla que los actos faraónicos que montaba Alberto Ruiz-Gallardón para copiar las celebraciones que se organizan el 2 de mayo en la Comunidad de Madrid. Los premiados fueron Madres contra la Droga; voluntarios por Madrid; Ángel Sanz Briz, a título póstumo, por salvar la vida de 5.000 judíos en Hungría en la Segunda Guerra Mundial y el doctor Diego Figuera Álvarez, fundador del hospital de día Ponzano.
Algunos concejales del PP no ocultaron su malestar por ‘el papelón’ que les estaban haciendo pasar el Ayuntamiento a sus compañeros de partido
El exministro de Justicia acudió con sus antecesores Ana Botella y José María Álvarez del Manzano, que se sentaron en segunda fila, junto al concejal Carlos Sánchez Mato, que ha sido el promotor de la comisión de investigación sobre los últimos mandatos municipales del PP. El PP ha calificado esa iniciativa como una “causa general”. Mato, y muchos de los concejales de Ahora Madrid, no aplaudieron cuando la alcaldesa Carmena agradeció expresamente la presencia de los exalcaldes de la ciudad y ensalzó su trabajo.
Sánchez Mato está muy satisfecho porque la Junta Electoral dio luz verde recientemente a la comisión de investigación de la Deuda, la Contratación y Políticas Públicas. La comisión comenzará el 30 de mayo y se prolongará a lo largo de 28 sesiones de periodicidad mensual. Se trata de una copia de las investigaciones que se están haciendo en la Asamblea de Madrid sobre los gobiernos de Aguirre y Gallardón.
Algunos concejales del PP no ocultaron su malestar por ‘el papelón’ que les estaban haciendo pasar a sus compañeros de partido. Álvarez del Manzano y Alberto Ruiz-Gallardón se fueron pronto y la que se quedó al café con churros y porras fue Ana Botella.
Además, Esperanza Aguirre, portavoz popular, también estuvo en el acto, pero se fue corriendo al arriado de la bandera nada más empezar, mientras que Cristina Cifuentes esperó hasta el último momento. Poco después llegaba Marta Higueras, que había representado al Ayuntamiento de Madrid en la Plaza de Colón. Esta coincidencia de horarios del arriado de la bandera en Colón con la entrega de medallas fue como un juego de las sillas que la alcaldesa Carmena dijo en su discurso que era producto de la “falta de entendimiento”.
Por otro lado, Carmena cito en varias ocasiones de su discurso a su majestad el Rey, lo que parece que no gustó a los concejales de Ahora Madrid más propensos a llamarlo ‘ciudadano Borbón’. Para colmo la alcaldesa acudió a la Misa ofrecida por el arzobispo de Madrid, Carlos Osoro.
