La televisión es la estrella de la campaña electoral. Y no sólo por los debates, sino también por las entrevistas y comparecencias de los candidatos en todo tipo de formatos audiovisuales. Moncloa valora la posibilidad de que en esta ocasión el candidato del PP no conceda entrevistas a los medios impresos, rompiendo así con una larga tradición. La teoría es que estas entrevistas en los medios de papel apenas tienen trascendencia en el cuerpo electoral. La televisión, por contra, resulta mucho más eficaz, directa y llega a un número mayor de posibles votantes sin apenas intermediarios.
Rajoy da muy bien en pantalla, se dice ahora, después de tantos meses oculto tras el plasma
No se ha desvelado aún la fórmula por la que optará el equipo que dirige la campaña del PP, pero de momento hay enormes posibilidades de que no se concedan entrevistas escritas con el candidato Rajoy. Se buscará un formato diferente, aún por desvelar. El equipo que dirige Jorge Moragas está muy satisfecho de las intervenciones televisivas del líder de su partido. El amable encuentro en casa de Bertín Osborne, una emisión que contó con una audiencia espectacular y con unos resultados muy positivos, ha ayudado a tomar esta decisión. Rajoy da muy bien pantalla, se dice ahora, después de tantos meses oculto tras el plasma y sin acceder a plantificarse ante las pantallas.
También compareció este sábado en la Sexta, un canal en el que el PP no resulta habitualmente bien tratado en sus diferentes espacios pero que, en esta ocasión, todo resultó a pedir de boca. El candidato respondió a una veintena de preguntas y no sólo salió vivo del empeño, según sus asesores, sino que logró su objetivo: ganó más que perdió. También aparecerá junto a María Teresa Campos, en otro programa de perfil amable. Ya lo hizo hace días Pedro Sánchez con un resultado satisfactorio.
Petición de entrevistas
Varios medios impresos han solicitado, según fuentes de Génova, las tradicionales entrevistas con todos los cabeza de cartel. Es muy posibble que, salvo cambio de criterio, el presidente no aparezca como protagonista en esta fórmula periodística. Un género algo alicaído en nuestro presente informativo. No hay tiempo, aducen sus asesores. Lo que se traduce en que hay que ocupar la agenda del candidato en otros menesteres con mayor impacto.
El líder popular ha optado por recorrer todos los lugares posibles de la 'España profunda'
El líder del PP se va a emplear a fondo en sus recorridos por España, a la busca del voto de esas localidades de menos de diez mil habitantes que pueden inclinar la balanza del resultado final. Hay más de cien diputados pendientes del 'disputado voto del señor Cayo', como ya se explica en las diferentes sedes de los partidos. Mientras Ciudadanos o Podemos centran sus esfuerzos en las grandes urbes, donde cuentan con enormes posibilidades de ampliar su cesta de papeletas, Rajoy ha optado por recorrer todos los lugares posibles de la 'España profunda', para asegurarse el respaldo de un sector de la población de mayor edad, poco frecuentador de las redes sociales y mucho más apegado a la tradición informativa de los medios audiovisuales.
La tele es el principal vehículo mediático de esta campaña y la prensa escrita, de momento, parece que se tendrá que conformar. Hay tiempo aún de modificar este planteamiento. Pero no se escuchan en Moncloa muchas voces en favor de mantener la costumbre. Es una campaña distinta, con más personajes, más partidos y más posibilidades de que todo cambie. Y de momento, lo que parece que va a cambiar es la estrategia de comunicación.
