Moncloa ha aceptado finalmente. Después de cuatro años de esfuerzos, empeños, invitaciones y mensajes, Mariano Rajoy ha dado su brazo a torcer y acudirá al programa "Salvados", que dirige Jordi Évole en La Sexta. Será el próximo domingo, según anunció la propia cadena en la noche de Viernes Santo. El equipo del presidente del Gobierno en funciones siempre había rechazado tal posibilidad, por pensar que se trata de un programa poco amigable para con los postulados de su gobierno. Las cosas han cambiado. En especial desde la visita que girara a Moncloa Susana Griso, quien le entrevistó en su emisión matutina, "Espejo público", con un resultado en el que todos salieron muy satisfechos. Hay que salir a contar las cosas y hay que acudir a los platós, viene a ser ahora la teoría con la que se manejan, un poco tarde, en el entorno presidencial.
Évole no es Bertín Osborne, pero los asesores presidenciales consideran que el programa, cuya audiencia está en las antípodas del PP, puede convertirse en una plataforma excelente para transmitir la posición del Gobierno ante las negociaciones para cerrar pactos de investidura. Se trata de acabar de una vez por todas con la idea de que Rajoy es el responsable del actual bloqueo institucional, que no se mueve, que no dialoga, que no quiere negociar con nadie. Ahora Rajoy toma la iniciativa y pretende prodigarse mucho más en platós y en encuentros con informadores y tertulianos. Évole será el primer paso y quizás luego sigan más. Se estudia por ejemplo un nuevo encuentro en Onda Cero, con Carlos Alsina, que ya le entrevistó hace meses en precampaña con un resultado nada agradable para el jefe de Gobierno en funciones, ya que se enzarzó en una discusión sobre si los catalanes seguirían siendo españoles en el caso de que la Generalitat logre consumar sus propósitos independentistas. Un lío fenomenal. Esta visita radiofónica está por confirmar, así como otras varias en fase de estudio.
El encuentro con Évole se cerró hace ya unos días, antes de Semana Santa. En Presidencia están convencidos de que Rajoy saldrá airoso de este mano a mano. Rajoy ya acudió a una sesión especial del programa del sábado noche de esa misma cadena en la que varios invitados le planteaban preguntas diversas sobre la actualidad. Resultó una sesión muy amable, sin apenas cuestiones incómodas para el invitado. En La Sexta hay un equipo directivo que mantiene unas relaciones excelentes con el entorno del presidente y velarán intensamente para que esta incursión en territorio supuestamente hostil se convierta, como ya ocurrió, en un diálogo sin asperezas.