Nacho Villa parecía tener las horas contadas en la televisión de Castilla-La Mancha tras la derrota de María Dolores de Cospedal ante la dupla PSOE-Podemos, pero ahora las cosas parecen cambiar y podría estar al frente de la televisión pública más de lo que a la izquierda le gustaría. En cualquier caso, sus enfrentamientos con los socialistas van camino de marcar una época. Tras años de polémicas, el experiodista de COPE estaba entre ceja y ceja para Emiliano García-Page, hasta el punto de que llegó a pedirle la dimisión en su discurso de la misma noche electoral, algo realmente inaudito.
Ahora, desde Toledo se informa de que el nuevo vicepresidente de la Junta de Comunidades, José Luis Martínez Guijarro, ha telefoneado a Villa para pedirle que dimita y acelere así el relevo en la dirección de la TV pública, que en plena época de recortes dispone de un presupuesto de 40 millones de euros para todo 2015. Sin embargo, Villa no quiere irse antes de tiempo ni considera que tenga que dimitir, y le ha comunicado al vicepresidente socialista que no se irá mientras no tenga un sustituto, que debería nombrarse por la vía ordinaria: nombrando un nuevo consejo de administración de la radiotelevisión pública, responsabilidad que cae en manos de los partidos con representación en las Cortes. Este organismo sería el que formalmente nombraría al nuevo director, que sería refrendado por el gobierno autonómico.
Villa no considera que tenga que dimitir, y le ha comunicado al vicepresidente socialista que no se irá mientras no tenga un sustituto
El Partido Popular, que fue el partido más votado en Castilla-La Mancha a pesar de que el PSOE consiguió arrebatarle el gobierno gracias a Podemos, no tiene ninguna prisa por ceder poder en la TV pública, y espera encontrar una figura de consenso junto a los socialistas y Podemos. Las negociaciones podrían alargarse semanas, o incluso meses, en los que Villa podría seguir siendo la peor pesadilla del nuevo gobierno socialista. El 27 de julio, el periodista madrileño cumplirá cuatro años al frente del ente público, si es que se mantiene al frente.
Cuentan a este Buscón que Page brama contra Villa, que lejos de mostrar clemencia con un PSOE que en cualquier caso lo va a defenestrar, ha preferido morir matando para tomar, aún este fin de semana, decisiones curiosas, como el hecho de que la toma de posesión del nuevo presidente no tuviera cabida en el informativo autonómico de las 8 de la tarde del sábado hasta pasados los 20 minutos de programación. Antes de ello, el caso de una anciana sin localizar en un pueblo albaceteño, un incidente de tráfico en Tomelloso (Ciudad Real) o la operación salida típica de principios de julio fueron temas que, según la escaleta del programa, tenían más relevancia que la vuelta del PSOE a las instituciones autonómicas castellano-manchegas.
El exalcalde de Toledo llegó a calificar de "fascismo informativo" la labor de Villa, que ha protagonizado sonoros enfrentamientos con sus trabajadores más sindicalizados, algunos de los cuales han denunciado con vehemencia sus presuntas "manipulaciones". Tal y como ha informado Vozpópuli, Villa tiene pendientes varias causas pendientes con la justicia.
