La Justicia belga a desestimado la demanda presentada por el ex presidente fugado y eurodiputado, Carles Puigdemont, contra el juez Pablo Llarena, al que acusaba de imparcialidad por negar en 2018 que los ahora condenados por el referéndum ilegal del 1-O fueran "presos políticos". El juez belga se considera "incompetente" para juzgar estos hechos y ha dado la razón al juez español al concluir que sus declaraciones sobre los entonces presos preventivos estaban "amparadas por la inmunidad de jurisdicción".
La sala del tribunal civil belga, además, ha denegado la pregunta prejudicial al Tribunal de Justicia de la UE que reclamaba la acusación.
Los hechos denunciados por Puigdemont y el resto de ex consejeros fugados ante el juzgado belga se produjeron en 2018. La denuncia fue, en realidad, una forma de intentar neutralizar al juez Llarena, responsable de las euroórdenes emitidas contra todos los huidos. En esta situación, presentaron una demanda de daños derivados de la presunta parcialidad de Llarena. Demanda que ahora la Justicia belga ha desestimado y que otros jueces en España ya habían previsto que tendría este final.
Cómo quizás sepan ya, la justicia belga ha archivado la demanda de Puigdemont contra el magistrado del TS Llarena. Aquí les dejo como curiosidad el hilo en el q vaticinaba q dicha demanda (extravagante y artificiosa) debía ser archivada con costas, como así ha ocurrido. https://t.co/7ABGE4tqAZ pic.twitter.com/Bf0Gr1AMem
— LuisaMaría (@LuisamarGG) April 21, 2020
A pesar de todo, Puigdemont y el resto de ex consejeros tienen previsto recurrir la decisión judicial ante el Tribunal Supremo de Bélgica porque consideran que "la interpretación sobre la inmunidad de jurisdicción es incompatible con el espacio común de justicia europeo".