ERC vuelve a poner en el objetivo de las críticas a Carles Puigdemont y JxCat por el auto-homenaje del prófugo y expresidente de la Generalitat en Perpiñán (Francia). En ese acto, los independentistas congregados abuchearon a Oriol Junqueras, líder de ERC, y aplaudieron efusivamente a su líder en el 'exilio'.
El diputado y dirigente de ERC Gabriel Rufián ha respondido a las críticas a la mesa de diálogo, vertidas por JxCat durante su minigira en el sur del país galo. "Está muy bien que te aplaudan en Perpiñán, pero el reto es que lo hagan en Cornellá, en Santa Coloma o en Sabadell", ha dicho en un encuentro informativo este martes.
En este sentido, ha rechazado el "simbolismo" y "humo" de JxCat y Puigdemont y ha puesto en valor el "diálogo, entendimiento, reconocimiento mutuo y política". Todo ello, para reivindicar la mesa de diálogo entre gobiernos, que debería volver a reunirse en la tercera semana de marzo y "si puede ser en el Palau de la Generalitat".
Reprocha los pactos de JxCat y PSC
Rufián ha mostrado sus dudas sobre el resultado de esta mesa y "esperan lo mejor del Gobierno español". "Estamos preparados para lo peor", ha admitido, comparando esta situación con la reforma y recorte del Estatuto de Autonomía. "Estamos preparados para que la izquierda española vuelva a decepcionarnos", ha asegurado, mientras ha indicado que ERC se mantendrá en este espacio de diálogo.
Rufián ha aprovechado su intervención para continuar respondiendo a las críticas de JxCat, que se ha negado a avanzar en la mesa de negociación "a cambio de nada". "Nada de lo que está haciendo ERC es a cambio de nada. Hacer política nunca es a cambio de nada", ha subrayado el dirigente republicano.
"A cambio de nada es darle la tercera institución del país, la Diputación de Barcelona, al PSC para que no la tenga Izquierda", ha cargado Rufián en referencia al pacto entre socialistas y postconvergentes. "La única pregunta que nos debemos hacer es si también lo hará con la primera institución", ha aseverado.
JxCat da la espalda a Rufián
Otro de los dardos enviados a los dirigentes de JxCat se ha centrado en las declaraciones de Clara Ponsatí, que tildó de "engañifa" la mesa diálogo entre gobiernos. A pesar de "todo el respeto" que le merece alguien que está "en el exilio", en la mesa de negociación con el Gobierno central "no se juega al póker".
Su intervención ha concluido con un nuevo ataque a JxCat. A su juicio, ERC no ha cambiado, a pesar de decisiones como permitir la investidura de Pedro Sánchez. "Los que hoy ponen en día nuestras convicciones aplaudían con las orejas a Pujol cuando pactaba con González y Aznar", ha sostenido.
Pese a que al acto en el Casino Gran Madrid han acudido representantes de diversos partidos políticos independentistas, como el BNG o Bildu, e incluso el líder de UGT, Josep María Álvarez, ningún diputado o dirigente de JxCat ha estado presente.
