El beneficiario de los presuntos contratos fraccionados que otorgó Laura Borràs cuando estaba al frente del Institut de Lletres Catalanas, Isaías Herrero Florensa, ha sido condenado a cinco años y tres meses de cárcel por la Audiencia Nacional por falsificación de moneda, tráfico de estupefacientes y defraudación de fluido eléctrico, según la sentencia avanzada por El Periódico.
Herrero definió su relación laboral con Borràs como "trapis" que facturaba": "Con Borràs como jefa, yo facturo con la cooperativa y facturo unos trapis por allí", afirmó en las conversaciones grabadas por los Mossos d'Esquadra en noviembre de 2017.
Solo un mes después de esta conversación, el beneficiario principal de la ahora diputada de JxCat en el Congreso se le incautó droga en su vivienda.
"Enriquecimiento ilícito"
La fallo judicial sostiene que Herrero, junto con el procesado, Marc G. T., actuaron "de común acuerdo y movidos por un ánimo de enriquecimiento ilícito". La sentencia refleja que su modus operandi era recibir billetes falsos de 50 euros desde el extranjero a través de un apartado de correos de Castellbell i el Vilar para, posteriormente, colocarlos en el mercado.
Además de falsificación de moneda, el tribunal le ha impuesto otros tres años de prisión por tráfico de drogas. Según el mismo rotativo, en la entrada y registro practicado en su domicilio de Vacarisses se encontraron sustancias estupefacientes y una báscula de precisión. La resolución de la Audiencia esgrime que el colaborador de Borràs tenía esas sustancias "para traficar y lucrarse con ellas".
El tercer delito por el que ha sido condenado guarda relación con una manipulación del contador eléctrico que practicó en su domicilio para pagar menos de factura.