Los casos de sarampión han crecido un 300 por ciento en todo el mundo entre enero y marzo de 2019, hasta los 112.000, mientras que en el mismo periodo del año pasado se produjeron apenas 28.000, según datos preliminares de la Organización Mundial de la Salud (OMS) publicados este lunes.
Si bien los datos son provisionales y aún no están completos, la OMS reconoce que existe una tendencia "clara" al alza. Hasta la fecha, se han reportado casos en 170 países, en comparación con los 163 del primer trimestre de 2018. Los diagnósticos se han disparado un 700% en África, un 300% en Europa, un 100% en Oriente Medio, un 60% en América y un 40% en Asia.
La OMS alerta de que muchos países se encuentran inmersos en importantes brotes de sarampión, y en todas las regiones del mundo se registran aumentos sostenidos de casos. Los brotes actuales incluyen la República Democrática del Congo, Etiopía, Georgia, Kazajstán, Kirguistán, Madagascar, Myanmar, Filipinas, Sudán, Tailandia y Ucrania, que causan muchas muertes, sobre todo entre los niños pequeños.
Crece en países con vacunas
En los últimos meses, el número de casos también ha aumentado en países con una alta cobertura general de vacunación, como Estados Unidos, así como Israel, Tailandia y Túnez, ya que la enfermedad se ha propagado rápidamente entre grupos de personas no vacunadas.
El sarampión es una de las enfermedades más contagiosas del mundo, y puede ser "extremadamente grave", advierte la OMS. En 2017, el año más reciente para el que se dispone de estimaciones, causó cerca de 110.000 muertes. "Incluso en los países de ingresos altos, las complicaciones tienen como resultado la hospitalización en hasta una cuarta parte de los casos, y pueden llevar a una discapacidad de por vida, desde daño cerebral y ceguera hasta pérdida de audición", señala la OMS.
La enfermedad se puede prevenir casi por completo mediante dos dosis de una vacuna segura y eficaz. Sin embargo, durante varios años, la cobertura mundial con la primera dosis de la vacuna contra el sarampión se ha estancado en un 85 por ciento. "Esta cifra es aún inferior al 95 por ciento necesario para prevenir brotes, y deja a muchas personas, en muchas comunidades, en situación de riesgo. La cobertura de la segunda dosis, si bien aumenta, se sitúa en el 67 por ciento", cuantifica el organismo.