Nueva detención en el 'caso Púnica'. En esta ocasión de una persona muy cercana a Francisco Granados, ex dirigente del PP madrileño que lleva más de un año encarcelado por su implicación en esta trama de corrupción. Se trata de Ignacio Palacios Azazuri, quien durante años fuera la mano derecha del político, según ha confirmado Vozpópuli en fuentes cercanas a la investigación y ha confirmado posterormente la Audiencia Nacional. Las pesquisas que han llevado a él arrancan de la confesión realizada antes del verano por el otro presunto cabecilla de la red, el empresario David Marjaliza, que durante once horas decidió tirar de la manta y aportar numerosos datos de las actividades delictivas en las que participó. Además de Ignacio Palacios, ha sido arrestada su mujer y e han realizados tres registros, uno de ellos en Ávila y otro en Valdemoro, epicentro de la trama y donde residían los detenidos ahora.
Palacios ha seguido a Granados en su carrera política. Cuando éste acabó en el Senado, comenzó a trabajar para un constructor también imputado en Púnica
La vida laboral de Palacios ha discurrido siempre al lado de Granados, del que era su hombre de máxima confianza y al que ha seguido en todos sus puestos políticos. De hecho, fue jefe de personal del Ayuntamiento cuando el político encarcelado fue regidor de Valdemoro. Tras el salto de este al ejecutivo autonómico, se convirtió en jefe de su gabinete e, incluso, ocupó el puesto de director general del Centro Regional de Coordinación e Información. También fue nombrado consejero del Campus de la Justicia de Madrid SA, del que el dirigenre regional del PP era presidente, y de Arpegio, la sociedad pública del suelo de la Comunidad ahora bajo sospecha por la gestión que hizo de los fondos Prisma. Finalmente, fue directivo de la empresa Vía y Obras, propiedad del constructor Ramiro Cid Sicluna, también imputado en el sumario del caso Púnica.
Declaró como testigo
La detención, realizada en la localidad madrileña de Valdemoro por la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil, se produce en un momento de intensa actividad por parte del titular del Juzgado Central de Instrucción número 6, Eloy Velasco, que en las últimas semanas está tomando declaración a medio centenar de personas presuntamente relacionadas con diferentes aspectos de la trama. Algunos de ellos, mencionados en su confesión por David Marjaliza, el cabecilla 'arrepentido' que ha decidido colaborar con la investigación y que ha abierto nuevas vías para indagar. No obstante, el nombre de Ignacio Palacios no es nuevo en el sumario. De hecho, los informes de la Guardia Civil sobre las intervenciones telefónicas recogen numerosas conversaciones que éste mantuvo con Granados y que ya entonces los agentes consideraron relevantes para la investigación.
El juez interrogó en diciembre del año pasado al ahora detenido por el yate que su jefe, Granados, disfrutaba pese a no figurar como propietario
Además, ya había acudido a la Audiencia Nacional a declarar ante el propio juez Eloy Velasco. Fue el 5 de diciembre del año pasado, y entonces fue interrogado por el magistrado y la Fiscalía Anticorrupción por el yate de 15 metros de eslora que disfrutaban Granados y Marjaliza, pero que sobre el papel era propiedad de la familia de José Miguel Villar Mir, dueño de OHL. En concreto, el juez le preguntó quién pagaba los gastos de mantenimiento de la embarcación, a lo que Palacios contestó: "Yo sé que el señor Granados alguna vez manifestaba su indignación con Javier López Madrid [yerno de Villar Mir] porque le reclamaba dinero del barco, pero no sé en concepto de qué". Velasco le espetó entonces: "¿No será porque el barco es de más de uno, y uno de ellos era Granados pero no quería figurar como tal?". Palacios optó entonces por un "no sé" que le sirvió también para parapetarse cuando le preguntó por qué su jefe no quería constar como propietario del barco.