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Un gran conjunto de obras de las vanguardias españolas serán expuestas en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando gracias a la donación del legado Mordó-Alvear, constituido por piezas de algunos de los pintores más representativos del país, realizadas desde los años 50 hasta finales de los 80.
Esta muestra, que podrá visitarse desde este miércoles hasta el 8 de enero de 2012, está compuesta por 57 piezas firmadas por nombres como Rafael Canogar, Manuel Rivera, Darío Villalba, Pablo Serrano, Gregorio Prieto, José Caballero, Antonio Lorenzo, Francisco Farreras, Joan Fontcuberta, Lucio Muñoz, Joan Hernández Pijuan, Gustavo Torner, Gerardo Rueda, Fernando Zobel, José Luis Fajardo.
En esta exposición se muestra también la obra de artistas independientes como Lucio Muñoz, Francisco Farreras, Antonio Lorenzo, Bonifacio, José Luis Fajardo, Josep Guinovart, Joan Fontcuberta o el japonés afincado en España Mitsuo Miura, afines en su búsqueda de una plástica del informalismo o del "arte otro" abstracta. Asimismo, se observan las obras figurativas de Matías Quetglás, Jacinto Salvadó y el retrato de Juana Mordó dibujado por Daniel Quintero.
Además, dentro de este legado destacan tres obras de artistas anteriores a las vanguardias de los años 50: una plancha de cobre de Salvador Dalí titulada 'La vida es sueño' y dos dibujos, uno surrealista de José Caballero y otro del pintor manchego Gregorio Prieto, dos ejemplos de la pintura que abrió la brecha de la modernidad más radical en España.
El director de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, Antonio Bonet Correa, ha destacado que se trata de una exposición "histórica" que se debe a la "generosidad" de Helga de Alvear, discípula de Juana Mordó.
La actualidad y la importancia de esta obra radica, a su juicio, en que es representativa de las vanguardias que surgen en España después de la Guerra Civil y que aún están "vivas y vigentes". "Esta exposición muestra cómo el arte español desde la vanguardias de los años 50 hasta hoy sigue dando una nota importantísima a nivel internacional", ha subrayado.
Este legado aparece en esta exposición colocado de acuerdo a un discurso en el que se observa la evolución de la pintura española. "Es la época del informalismo, la época de las vanguardias españolas que ya son históricas pero que aún están vigentes", ha explicado.
Rafael Canogar, por su parte, ha declarado que esta es una exposición "histórica y muy actual". Para el artista, Helga de Alvear ha sido una "gran coleccionista", que ha heredado el "amor por el arte" de Juana Mordó, aunque "ha buscado sus propias coordenadas" en su recorrido por el mundo del arte.
Juana Mordó (Salonica, Grecia, 1899 - Madrid, 1984) fue en Madrid durante la segunda mitad del siglo XX una figura esencial, ya que se convirtió en pionera y fundadora de una Galería de Arte de vanguardia. A ella se debe, en gran medida, el afianzamiento y la difusión del arte español.
Helga de Alvear, amiga y colaboradora de la marchante, continua la labor que comenzó su maestra con la galería que lleva su mismo nombre, y que se describe "continuadora del interés por los lenguajes de vanguardia de Juana Mordó".