Las cinco grandes entidades españolas han comenzado a detallar a la CNMV las nuevas necesidades de capital que les ha impuesto Bruselas (descargue aquí el documento oficial de la cumbre). La nueva regulación de la Autoridad Bancaria Europea obliga a los grandes bancos a captar 26.000 millones de euros de nuevos fondos, de los cuales 9.000 son ya parte de su balance, puesto que la EBA ha aceptado finalmente el criterio defendido por España de que los bonos convertibles sean considerados como dinero líquido. Así pues, la banca española tendrá que captar 17.000 millones netos de capital.
Los dos grandes serán quienes más fondos necesiten para recapitalizarse, ya que entre ambos tendrán que captar el 80% del nuevo capital necesario. BBVA será quién más necesite reforzarse (necesitará 7.100 millones de euros) frente al Santander que tendrá que conseguir 6.487 millones de euros para reforzar su liquidez. "No hay un problema de sistema. Todos los bancos españoles pasaremos sin apuros" ha asegurado el Consejero Delegado del Santander, Alfredo Sáenz.
El tercero en el ranking será el Banco Popular que en su comunicación a la CNMV ha asegurado que, pese a que necesita 2362 millones de euros nuevos para reforzar su balance, seguirá adelante con sus planes para la compra del Banco Pastor. Bankia, por su parte, necesitará 1.100 millones nuevos para cumplir con los criterios de capital que le fija Bruselas.
La más desahogada de todas las entidades será La Caixa. La caja catalana apenas necesitará captar 602 millones de euros, con lo que apenas requiere un 10% de los fondos que necesitarán captar sus dos grandes rivales, Santander y BBVA.
El Gobierno español no ha logrado convencer en la cumbre. Cuando Grecia está al punto del colapso e Italia no sabe si podrá reformar las jubilaciones, es España la que tiene que sacar la cartera. Los requisitos a los bancos españoles son un duro golpe y Zapatero ha intentado esconderlo. El presidente del Gobierno cree que el plan de recapitalización sólo es “extraordinario y temporal” y está convencido que los bancos españoles serán capaces de cumplir con estos objetivos antes de junio de 2012.
ZP también ha destacado que una parte de la recapitalización española, 9.500 millones de euros, son obligaciones que los bancos españoles podrán reconvertir en acciones. Al final, los bancos españoles no necesitarían más que 17.000 millones, lo que la EBA no ha tenido en cuenta, sino que ha analizado el hecho de que las entidades españolas son las que, en Europa, tienen más activos ponderados por riesgo comparado con todos sus activos.
La comunicación de Moncloa no lo puede esconder: España tendrá que pagar mucho más sin haber obtenido la recalificación de su deuda. El país que halagaron Sarkozy y Merkel hace unos días ha sido castigado. Tendrá que cumplir con requisitos dudosos, ya que los cinco grandes bancos españoles no son los que más capitalización necesitan en España.