Después de un acto oficial de recuerdo a los muertos en la I Guerra Mundial, el presidente francés calificó las relaciones entre París y Berlín como fundamentales para continuar con el proceso de construcción europea.
En declaraciones a la televisión, Sarkozy se refirió al perdón y la paz como las bases de la construcción europea.
"Es la herencia que hemos recibido de nuestros abuelos y de nuestros padres y no tenemos derecho de dilapidarla", insistió Sarkozy, quien hizo estas declaraciones después de que varias fuentes hayan aludido en los últimos días a un proyecto conjunto franco-alemán para crear un grupo de países que lideren la eurozona.
"Defenderé Europa con todas mis fuerzas porque para Francia y Alemania hay dos soluciones: hay la convergencia y la paz o la divergencia y el enfrentamiento. La convergencia y la paz es Europa (...) no hay otra opción", se limitó a declarar Sarkozy.
El presidente francés indicó que hoy tiene previsto hablar con Giorgio Napolitano, el presidente de Italia, aunque no quiso aludir a la situación interna de ese país.
"Ahora tenemos decisiones difíciles que tomar y Europa es un logro que tenemos que defender", insistió Sarkozy.