El inicio del juicio oral contra el expresidente argentino Fernando de la Rúa (1999-2001) por su supuesta responsabilidad en el pago de sobornos para que el Senado aprobara en el 2000 una polémica reforma laboral fue aplazado hoy sin fecha, informaron hoy a Efe fuentes judiciales. La justicia había fijado para este martes el inicio del juicio contra De la Rúa y otros siete acusados, incluidos antiguos funcionarios y legisladores, todos procesados por supuesto cohecho.
El Tribunal Oral Federal 3 de Buenos Aires resolvió aplazar el comienzo del proceso a petición de la defensa del entonces secretario parlamentario Mario Pontaquarto, que destapó el escándalo, confirmaron los portavoces. De la Rúa, que renunció a su cargo en diciembre de 2001 en medio de un estallido social y una grave crisis económica, afrontará en el banquillo el juicio.
Unos 340 testigos están convocados a declarar en este proceso, entre ellos la presidenta argentina, Cristina Fernández, quien era diputada en el momento del escándalo, indicaron fuentes judiciales. También será llamado a declarar el por entonces vicepresidente de Argentina y presidente del Senado, Carlos Álvarez, quien renunció en octubre de 2000 a raíz de las denuncias de sobornos, lo que desgastó la Alianza encabezada por De la Rúa.
La Cámara Federal de Apelaciones de Buenos Aires consideró en 2009 que el pago de sobornos en el Senado en 2000 para aprobar una reforma laboral "fue un acto del Gobierno liderado por Fernando de la Rúa como presidente". En noviembre de 2007, Pontaquarto confirmó en un careo judicial con De la Rúa que el hoy exgobernante dio el visto bueno al pago de sobornos por importe de 4,3 millones de dólares a senadores para que se aprobara la ley.
En estas actuaciones están procesados quien fuera director de la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE, servicio secreto) Fernando de Santibáñez y el exministro de Trabajo Alberto Flamarique, así como Pontaquarto, que confesó haber llevado en un maletín el dinero de los sobornos. También serán sometidos a juicio los exsenadores del Partido Justicialista (PJ, peronista) Alberto Tell, Augusto Alasino, Remo Constanzo y Ricardo Branda.
En esta causa también está imputado el exsenador peronista Emilio Cantarero, pero el proceso contar él permanece suspendido por problemas en su salud. "No hay ninguna posibilidad de que haya sido cierto el pago de 'coimas' (soborno). Es un absurdo que se ha instalado", insistió De la Rúa en una entrevista publicada este fin de semana por la prensa local.