El Tribunal Correccional de París declaró hoy culpable al expresidente de Francia Jacques Chirac por malversación de fondos públicos y abuso de confianza, en relación con los empleos ficticios creados en el Ayuntamiento de París a principios de los años noventa.
El expresidente, de 80 años y ausente del Tribunal por motivos de salud, se enfrenta a una pena máxima de 10 años de cárcel. La Fiscalía solicitó su absolución, ya que consideró que durante el juicio no se habían aportado pruebas de que Chirac tuviera conocimiento de los supuestos empleos ficticios.
Chirac negó a través de sus abogados haber cometido "ninguna falta, ni penal ni moral" en relación con el caso en el que se intenta esclarecer si la Alcaldía de París creó empleos ficticios para pagar a personas que presuntamente trabajaban para su partido, cuando éste era primer edil (1977-1995).
"Este proceso mostrará que no hice nada que sea contrario a la probidad y la honestidad", declaródurante el proceso el ex jefe de Estado (1995-2007) a través del letrado Jean Veil, quien agregó que "no hubo enriquecimiento personal".
En el juicio, que se inició el pasado 5 de septiembre, Chirac será condenado por los cargos de malversación de fondos y abuso de poder a una pena de hasta diez años de cárcel y a una multa de 150.000 euros.