Los Carulla crearon Quercus Equity Partners a mediados de 2007 para canalizar algunas de sus inversiones entre las que destacó la de la aerolínea de bajo coste Clickair, fusionada posteriormente con la cotizada Vueling.
La creación de este vehículo también siguió a una restructuración de las sociedades controladas por la familia, de tal manera que cada uno de los cinco herederos del fundador de Agrolimen, Lluis Carulla Canals, tuviera su propia instrumental a través de la que canalizaba su participación en el imperio Agrolimen.
Sin embargo, el vehículo constituido para tratar de aprovechar oportunidades en el mercado no ha tenido los resultados esperados, especialmente debido a las consecuencias derivadas de la crisis económica que, ya por entonces, comenzaba a ofrecer los primeros síntomas de que sería más grave de lo esperado.
En realidad, Quercus Equity Partners pretendía gestionar las sociedades de capital riesgo que ya estaban incluidas en el entramado empresarial de la familia, Quercus Capital Riesgo e Inveramen, creadas en la primera mitad de la pasada década. La actividad del sector ha disminuido de forma considerable a causa de la crisis.
Proceso judicial
Además, a comienzos de 2011, varios miembros de la familia Carulla fueron imputados en el marco de una investigación que se sigue contra la estructura empresarial de los fundadores de Agrolimen por una presunta evasión de impuestos a través de sociedades radicadas en el exterior.
Así, Quercus pasará a ser una sociedad anónima convencional pero ya no será titularidad de la familia Carulla. A partir de ahora, tanto su control como su gestión correrán a cargo de Francisco Román Lamas, que figuraba como presidente de la ya extinta Quercus Equity Partners. De hecho, Lamas se incorporó al entramado de la familia Carulla cuando los empresarios catalanes comenzaron su aventura en el mundo del capital riesgo.
Lamas, por entonces socio de McKinsey y responsables de Finanzas Corporativas y Estrategia del grupo para España y Portugal, se incorporó a Quercus como primer ejecutivo, un cargo que ya no iba a abandonar.
Su nombre ha estado ligado a todas las operaciones que los Carulla han realizado en este ámbito y ahora está llamado a pilotar la nueva sociedad, que operará bajo el nombre de Quercus Management.