El consejero vasco de Interior, Rodolfo Ares, ha afirmado que, tras la reunión que mantendrá con el ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, su Departamento procederá a "ajustar y retirar" la escolta "progresivamente" a los distintos colectivos para adecuarla a "la nueva situación", una vez "constatado fehacientemente" que "no hay riesgo de atentados o amenazas para los protegidos".
Según ha adelantado, el responsable de Interior del nuevo Gobierno tiene previsto desplazarse a Euskadi, en una fecha todavía sin concretar, para celebrar la primera reunión oficial con su homólogo vasco. Ares ha afirmado que, durante el encuentro con el ministro de Interior, ambos abordarán tanto la reducción de escoltas como otros asuntos relativos a la seguridad.
La intención del jefe de la Ertzaintza es analizar la situación de la política antiterrorista y abordar la coordinación de la Ertzaintza con otros Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado en materias como la delincuencia organizada, delitos informáticos, violencia de género, seguridad vial o terrorismo de origen islamista, con el objetivo de "reforzar al máximo" la cooperación y colaboración entre las dos Administraciones.
"Hemos tenido una primera conversación (telefónica) en la que le he propuesto que, en cuanto la agenda se lo permita, tengamos una reunión en Euskadi. No le ha parecido mal la propuesta y estamos a la espera de cuadrar agendas", ha explicado.
El Gobierno vasco tiene previsto que, a lo largo de este mes, se vaya retirando la protección a sus directores y viceconsejeros y su pretensión es "trabajar en el camino en el que, progresivamente, se vayan ajustando y reduciendo las medidas de protección a personas individuales", después de que ETA haya anunciado "que abandonaba todas las actividades terroristas".
Prudencia y tiempo para analizar los riesgos reales
"Hemos sido prudentes y nos hemos dado un tiempo para constatar fehacientemente que no había un riesgo de atentados ni amenazas contra los protegidos", ha afirmado. Ares ha recordado que su Departamento ha mantenido reuniones "con todos los colectivos afectados y sus responsables" para "analizar la situación".
"Quiero hacerlo, en primer lugar, con el ministro del Interior pero, objetivamente, progresivamente, después de esa reunión iremos adoptando medidas de ajuste y retirada de escoltas, porque hay que adecuar nuestras medidas a la nueva situación, y la nueva situación es que no hay riesgo ni de atentados, ni de amenazas por parte de ETA; porque se ha ido comprobando con informes de responsables de la Ertzaintza", ha precisado.
No obstante, ha garantizado que "los ajustes se harán siempre partiendo de esta realidad y de este análisis", pero también "teniendo en cuenta las circunstancias especiales que puedan darse en algunas personas, por su estado de ánimo, el lugar donde residan o la responsabilidad institucional que tengan".
El jefe de la Ertzaintza ha querido "reconocer el trabajo que los agentes privados de seguridad privada han prestado a las personas que han protegido en Euskadi". "Nunca se han escatimado esfuerzos para gastar lo necesario en medidas de protección, pero es evidente que tenemos la responsabilidad de gestionar bien los recursos y cuando no son necesarias medidas de protección, ajustarlas", ha señalado.
Política penitenciaria
Entre los previsibles asuntos que el consejero de Interior tratará con Jorge Fernández Díaz destaca el de la política penitenciaria en la que, a juicio de Ares, sería "absolutamente necesario" que, "desde el máximo consenso", se aborde "una política dinámica que permita, por un lado, acercar presos a Euskadi", y, por otro, que "todos aquellos presos que, de forma individual, se alejen de la violencia y soliciten acogerse a los beneficios penitenciarios, puedan recorrer el camino para que, cumpliendo sus penas, se reinserten".
A su juicio, ello "podría ayudar, por una parte, a hacer irreversible más rápidamente el final definitivo del abandono de ETA, a que se disuelva definitivamente, y a asentar convivencia". "Lo que está pasando en relación con los presos, por parte de los radicales abertzales, es que están trasladando una política de engaño a los presos, porque hay que decir con claridad que no va a haber amnistías, no va a haber soluciones colectivas", ha señalado.
Por esta causa, ha calificado de "imprescindible" que los reclusos de la banda "recuperen su voz y su independencia" para "poder tomar decisiones y desarrollar esa política combinada a la que he hecho referencia".