María Porto es, ante todo, una mujer práctica, con los pies muy pegados a la tierra. Vinculada al mundo del arte desde 1992, cuando comenzó a conquistar posiciones en la galería Marloborough de Madrid -la cual llegó a dirigir durante cinco años- y después de crear la consultora de arte Aqualium, a Porto no le faltan los proyectos. Desde noviembre del año pasado pilota el nuevo espacio de arte del Corte Inglés ubicado en Castellana 85. El éxito ha sido tal que está previsto abrir un segundo espacio en los almacenes de Isidoro Álvarez en Marbella.
El espacio,ubicado en la segunda planta, mide unos 300 metros cuadrados, y abrió sus puertas con una exposición titulada Diálogos escultóricos. En ésta se exhibieron 65 obras de 13 artistas. Algunos de los nombres presentes en la selección fueron Martín Chirino, quien creó una pieza especialmente para la ocasión, valorada en 9.440 euros; también una escultura de Gerardo Rueda, cuyo precio sobrepasada los 550.000 euros.
A esos se suman nombres como Miquel Navarro, José Manuel Ballester o Xavier Mascaró, junto a jóvenes artistas como Gervasio Pérez y Mar Solís. Cabe destacar, además, que el logo del espacio estuvo a cargo de Alberto Corazón, diseñador de la imagen de instituciones como el Círculo de Bellas Artes, la Fundación Mapfre o Anaya,quien además exhibe una pieza valorada en 1.980 euros. También exponen piezas Blanca Muñoz (8.850 euros) y Alberto Bañuelos (17.700 euros)
Aunque la esposa de Francisco Álvarez Cascos, presidente del Principado de Asturias, figura como asesora, María Porto es la responsable del proyecto. Ella misma es quien ha hecho las gestiones directas con aquellos artistas "que no tienen exclusividad" con alguna galería, aunque también es cierto que en muchos casos ha sabido ingeniárselas para saltárselas.
Con la idea de desacralizar los espacios de arte y de democratizar el acceso de las obras a quienes deseeen adquirilas aunque no sean expertos, Porto propone alternativas que van desde obra gráfica por 100 euros hasta ofertas más elevadas. Lo curioso, sin embargo, es la vecindad de un Rueda con papeles pintados, cojines, cortinas y hasta una selección de marcos. ¿Coleccionismo o decoración?
