Entre acudir a las manifestaciones en protesta por la reforma laboral o ser testigo de la tercera elección de Mariano Rajoy como presidente nacional del Partido Popular, los líderes de UGT y de Comisiones Obreras, Cándido Méndez e Ignacio Fernández Toxo, respectivamente, han preferido agarrar la pancarta de las movilizaciones que ellos mismos han convocado.
Dos de esos acontecimientos tendrán lugar en la capital andaluza. El próximo domingo Rajoy pronunciará en Sevilla su discurso de clausura del XVII congreso popular, pero allí no habrá ninguna representación de las dos organizaciones sindicales mayoritarias a pesar de que se las ha invitado tanto desde Madrid, a sus direcciones nacionales, como desde Sevilla, a las regionales.
Es habitual que el PP invite a sus congresos a las organizaciones sindicales, así como a la CEOE, además de al resto de las fuerzas con representación parlamentaria, bueno, no a todas. En el listado está el PSOE, CiU, PNV o el PAR, formación con la que gobierna Luisa Fernanda Rudi en Aragón. No está, en cambio el partido liderado por Francisco Álvarez-Cascos, Foro Asturias, y es que el día 25 también se celebran elecciones autonómicas en el Principado y no es cuestión de invitar al principal adversario político.
Los sindicatos han disculpado su asistencia a la clausura del XVII congreso del PP alegando la evidencia, que “estamos de manifestación contra la reforma laboral” del mismo presidente del Gobierno que ahora les invita, indicaron a Vozpópuli fuentes de Comisiones Obreras. Desde Andalucía, la respuesta ha sido la misma. De hecho, el secretario general de UGT-Andalucía, Manuel Pastrana, ha remitido una carta, en su caso al presidente del PP andaluz y candidato a la Junta autonómica, Javier Arenas, anunciando su inasistencia por estar en contra de una reforma laboral que "elimina los derechos laborales básicos de la clase trabajadora, destroza el marco de relaciones laborales, abarata el despido y facilita y aumenta, aún más, el paro en nuestro país".
"Guiño" a los sindicatos
Quizá sea éste le primero de los encontronazos de Arenas con los sindicatos, quien en su calidad de ministro de Trabajo en el primer Gobierno de José María Aznar, alcanzó amplios acuerdos con éstos que garantizaron la paz social. De hecho, quiso contar con los interlocutores sociales en la puesta de largo de su candidatura a mediados de enero cuando organizó unas jornadas sobre empleo, pymes y autónomos en las que intervinieron como ponentes el propio Pastrana así como el líder de Comisiones de Andalucía, Francisco Carbonero.
Además, falta por ver si la manifestación covocada en Sevilla tiene previsto pasar por del Palacio de Exposiciones y Congresos de la ciudad, que recoge la celebración de la cita congresual popular. Precisamente, uno de los temores del equipo del candidato popular es que, si como todo apunta,se alza no sólo con el triunfo sino con el Gobierno de la Junta de Andalucía, se incremente la confictividad social en esta Conmunidad. Es un tema que ha preocupado desde antes de las elecciones generales a los populares hasta el punto que motivó una reunión del coordinador del programa popular, Baudilio Tomé, con el secretario de Acción Sindical, Toni Ferrer, después del verano.