Pese a que los medios daban ayer la noticia de una reunión de Iñaki Urdangarin con el Rey y el Príncipe, la Casa Real ha salido al paso para decir que ni confirma ni desmiente una reunión del monarca con el duque. Sí ha trascendido que tanto Iñaki con la Infanta se encuentran hospedado en el pabellón de invitados de La Zarzuela.
La Casa Real rehusaba dar cualquier tipo de explicaciones ante las cuestiones que la prensa planteaba. “La Zarzuela ni confirma ni desmiente el encuentro, cuya celebración, de existir, afectaría al ámbito privado de la familia real”, se argumentaba desde el gabinete de prensa de la casa del Rey.
El duque de Palma llegaba a España esta semana para preparar con sus abogados su comparecencia en el juicio por el caso Palma Arena. Un día después aterrizaba su mujer, también objeto de noticia por los documentos encontrados por al Agencia Tributaria en los que había gastos personales semanales de 600 o 700 euros cargados a la sociedad Aizoon.
Por su parte Don Juan Carlos continuaba esta semana con su agenda oficial, y acudía el miércoles a Bilbao a la inauguración de la Torre Iberdrola acompañado de la Reina. Sin embargo sí ha lanzado un mensaje en el que parece haber referencias a la cantidad de noticias sobre la actividad económica de los duques. “La Constitución atribuye a los jueces en exclusiva la misión de juzgar y ejecutar las sentencias”, comentaba. Era en la entrega de despachos de la 62ª Promoción de la Carrera Judicial y en presencia de Carlos Dívar, Presidente del Consejo General del Poder Judicial.
Cambio de actitud
Por otro lado, son muchos los que aseguran que desde Zarzuela también se ha recomendado al duque que afronte de otra manera su relación con los medios. Después de la ya famosa huída a la carrera ante la presencia de prensa en Washington, Urgandarin se mostró calmado ante una reportera a la que comentó que él entendía perfectamente su trabajo, pero que "yo quisiera que entendiesen el nuestro". Su representante hacía pública también la intención del duque de ponerse en contacto con los medios, aunque sin precisar el modo.
También la Infanta, en un intento de acercarse a los medios, quiso hacer patente su queja por el constante seguimiento de los periodistas hacia su familia, lo que les impedía hacer una vida normal en su refugio norteamericano.