El nuevo tiempo político surgido del 20-D podría traer otro hecho singular en la historia de las Cortes durante la Democracia: un Parlamento presidido por un diputado que no pertenece al mismo grupo que el jefe del Gobierno. La idea sobrevuela estos días los cuarteles generales de los principales partidos, entre ellos el de Ciudadanos. La formación naranja ve con buenos ojos que esta responsabilidad recaiga en un electo de otro partido que no sea el PP. En concreto, su líder, Albert Rivera, sostiene que si la tercera autoridad del Estado la asumiera un diputado ajeno a la bancada popular daría una imagen de "pluralidad" en consonancia con la Cámara baja que han dibujado estas generales, la del fin del bipartidismo.
A nivel autonómico, sin embargo, este escenario ya se dio en la Asamblea Regional de Murcia el pasado junio, con la irrupción de Ciudadanos y Podemos. Los votos de ambos partidos emergentes y del PSOE auparon a la socialista Rosa Peñalver a la Presidencia de esta cámara autonómica, siendo la primera mujer en ostentar el cargo. La alianza de PSOE, Podemos y C's en esta elección, que podrían reeditarse ahora en el Congreso, según las intenciones de Rivera, sirvió para que Peñalver se impusiera por un voto al candidato popular, Domingo Segado. Por su parte, María López Montalbán, de Podemos, fue designada vicepresidenta primera gracias también a los votos de su formación, PSOE y Ciudadanos. El partido naranja, con sus cuatro diputados, respaldó luego la investidura de Pedro Antonio Sánchez (PP) como presidente de Murcia.
El presidente del Congreso, Jesús Posada, confesó el pasado 6 de diciembre que le gustaría repetir en la próxima legislatura
Está también el ejemplo de los Países Bajos, donde hay conformada una Gran Coalición entre los liberales -más votados-, y los laboristas -siguientes en las urnas-. En este país, la Segunda Cámara de los Estados Generales (que hace las veces de Cámara baja) está presidida por Gerdi Verbeet, del Partido Laborista. Sin embargo, el primer ministro neerlandés es Mark Rutte, del liberal VVD (Partido Popular para la Libertad y la Democracia). Rutte estuvo apoyando a Rivera el jueves en el almuerzo que el líder de C's mantuvo en Bruselas con los siete jefes de Gobiernos liberales europeos.
Ciudadanos, que ha pedido al PSOE de Pedro Sánchez que no sea un obstáculo, quiere que arranque la legislatura para poder empezar a negociar las reformas que, a su juicio, necesita España: Pacto por la Educación, contra la corrupción, plan de empleo de calidad, reforma de la ley lectoral... El partido de Albert Rivera cree que el líder del PP, Mariano Rajoy, puede asumir un gobierno en minoría (necesitaría que el PSOE le diera paso) y llegar al menos hasta diciembre de 2016, fecha en que tendrían que aprobarse los nuevos Presupuestos Generales del Estado.
El presidente de C's sabe que la primera gran negociación que se presenta deberá estar cerrada para el próximo 13 de enero, fecha de la sesión constitutiva del Congreso de los Diputados, con la formación de la Mesa y la elección del presidente de la Cámara baja. En una conversación informal con periodistas en la recepción que ofrecieron las Cortes el pasado 6 de diciembre, con motivo del Día de la Constitución, el presidente del Congreso, Jesús Posada, confesó que le gustaría repetir en el cargo en la próxima legislatura, aunque dijo que lo veía difícil, pronosticando que su partido necesitaría un 30% de los votos y 140 diputados para no sufrir contratiempos, que al final han aparecido.
Únicamente hay precedente de un diputado que ejerciera como tercera autoridad del Estado durante más de una legislatura: el del socialista Félix Pons Irazazábal, exministro de Administración Territorial con Felipe González (1985-1986), que fue presidente del Congreso durante la III, IV y V legislaturas, es decir, entre 1986 y 1996.
La cuarta autoridad del Estado, una carta a favor del PP
El próximo 13 de diciembre tendrá lugar dicha sesión constitutiva de la Cámara baja y está dirigida por la Mesa de Edad, presidida por el parlamentario con más años, asistido por los dos más jóvenes como secretarios. La primera votación se encargará de la elección del presidente del Congreso, que necesitará mayoría absoluta, por lo que los principales partidos están condenados a pactar, según los resultados del 20-D. En cambio, el PP no tendrá problema de conseguir la Presidencia en el Senado, donde ha mantenido mayoría absoluta con 124 representantes. No obstante, los populares podrían incluir el cargo de cuarta autoridad del Estado (ostentado por Pío García-Escudero hasta ahora) en las negociaciones con otras fuerzas.