Andalucía

Confirmado: Cristóbal Colón está enterrado en Sevilla, pero aún no sabemos quién fue realmente

Hay numerosas hipótesis sobre su origen como que fue un marino genovés, navarro, portugués, gallego, un bastardo real o judío converso

El enigma sobre la verdadera identidad de Cristóbal Colón, está a punto de ser resuelto y de manera definitiva, palabra de científico. Tras más de cinco siglos de especulaciones, teorías y debates sobre su origen, un grupo de investigadores de la Universidad de Granada (UGR) ha logrado identificar sus restos y, posiblemente, su procedencia. Todo esto será revelado en el documental ‘Colón ADN. Su verdadero origen’ de RTVE, que se emite para conmemorar la llegada de Colón a América

El catedrático de Medicina Legal José Antonio Lorente de la UGR nos confirma que los huesos enterrados en la Catedral de Sevilla pertenecen, sin lugar a dudas, al navegante que lideró la expedición española que dio lugar al encuentro entre Europa y el Nuevo Mundo. Este hallazgo, que ha sido replicado por varios laboratorios internacionales, pone fin a décadas de incertidumbre sobre la autenticidad de los restos conservados en la Catedral de Sevilla. 

La investigación de Lorente lleva más de 20 años en marcha, el investigador, que se formó en disciplina forense en el FBI estadounidense propuso audaces métodos desde que, en 2003, se desenterraron los restos que en la Catedral de Sevilla presumían la presencia del marino. 

Los primeros estudios sobre los restos de Colón, así como los de su hijo Hernando y su hermano Diego, se toparon primero con el mal estado de conservación de los restos óseos, unos 150 gramos asentados en Sevilla desde 1899. "Trabajábamos con huesos que eran como esmeraldas", detallaba Lorente en el curso de su investigación, "gastábamos muchos granos de hueso para obtener poca información". Esto obligó al equipo a hacer una pausa en su investigación y esperar a que la tecnología avanzara lo suficiente, era 2005. 

Al fin, el momento en el que la tecnología permite responder las preguntas del equipo de Lorente ha llegado. Las nuevas tecnologías de secuenciación genética permiten extraer información a partir de cantidades ínfimas de ADN, la fiabilidad de los datos obtenidos es "prácticamente absoluta". Este nuevo análisis no solo confirma que los huesos de Sevilla son los del Almirante, sino que también abre la puerta a resolver una de las incógnitas históricas más persistentes: ¿de dónde era Cristóbal Colón y por qué el misterio? 

¿Qué ocultaba? 

La procedencia de Colón ha sido objeto de debate durante siglos, muchos se preguntan el porqué de este misterio ante un personaje de tal relevancia en vida. Aunque la teoría más aceptada a nivel internacional es que nació en Génova, Italia, existen teorías alternativas que señalan otros lugares como su lugar de origen, desde Galicia y Cataluña, hasta Portugal, Navarra, e incluso países tan lejanos como Noruega o Croacia. Esta variedad de propuestas refleja la importancia de Colón en la historia mundial y el deseo de numerosas naciones de reclamarlo como parte de su Historia. 

Pero ese debate parece que va a llegar a su fin. Lorente ha confirmado que los resultados se darán a conocer durante la emisión del documental, y aunque aún no ha revelado detalles, ha insinuado que las pruebas genéticas podrían descartar la teoría genovesa y dar un giro inesperado a la historia.  

Cuestionado por más detalles, Lorente contesta a Voz Pópuli que no habrá más información por ahora. La ciencia, detallan desde la UGR, lleva otro ritmo que el que impone la presentación del documental. “Los resultados científicos completos y detallados de la investigación” serán presentados finalmente en noviembre, aún se están analizando datos recientes muy importantes que tienen trascendencia científica. El misterio sigue siendo la pauta dominante en torno a Colón

El documental explora las distintas teorías sobre el origen del navegante. La película, que se ha convertido en un evento esperado por historiadores y curiosos, recoge el trabajo de un equipo internacional de científicos y rastrea las hipótesis sobre la procedencia de Colón. 

Entre las teorías que se discutirán están las propuestas portuguesas, que sugieren que Colón podría haber sido un corsario llamado Pedro Ataide, o incluso un agente encubierto al servicio de la corona portuguesa. Otras hipótesis apuntan a que podría haber sido un noble mallorquín, un bastardo real o un judío sefardí que ocultó su identidad debido a las persecuciones religiosas de la época. Además, la teoría navarra, defendida por José María Ercilla, plantea que Colón pertenecía a la comunidad de los agotes, un grupo discriminado en el País Vasco y Navarra. 

El germen del Colón-nialismo 

El interés por Colón no solo radica en su lugar de nacimiento, sino también en la polémica que rodea su figura. Mientras que en Estados Unidos sus estatuas han sido derribadas por simbolizar el colonialismo y la opresión, en otros países se le venera como el hombre que abrió las puertas de la modernidad y la globalización. En función a la mirada histórica, héroe o villano, elevado o caído. 

"Hablamos de una figura de las más importantes en la historia universal, él cambió el rumbo y redefinió Occidente, sin embargo, es hoy denostado en el mundo anglosajón y en algunos ámbitos americanos; pero a la vez, es un icono apasionante que atrae mucha atención", ha valorado Regis Francisco López, documentalista y divulgador historiográfico que forma parte del nuevo documental. 

En el curso del rodaje, el documental llegó a barajar 25 "solicitudes de paternidad" sobre Colón procedentes de todo el mundo. La nueva visión de Colón usa el misterio de su origen y procedencia como cebo, pero aúna una visión historiográfica y científica que arrincona las interpretaciones patrióticas o políticas, ofreciendo respuestas fundamentadas a uno de los grandes misterios de la historia universal.  

Por cierto, más allá de la necesidad de tener nuevas versiones de la Historia a través de historias de personas como Colón el enigmático, este 12 de octubre abrimos un nuevo capítulo gracias a las posibilidades que la ciencia genética puede ofrecer a una historiografía que, casi podríamos decir, se asoma al inicio de un deslumbrante capítulo. 

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