Raquel lleva años luchando por recuperar la tutela de sus hijos, que ahora está en manos de la Junta de Andalucía. En los últimos días, esta batalla judicial se ha recrudecido cuando uno de los menores, de 15 años, se escapó para regresar a casa de su madre. Esta mujer acabó denunciada pero decidió contratacar y denunciar la situación. "Soy totalmente infeliz", argumentó el adolescente en un texto en el que afirma sentir amenazas por tomar la decisión libre de querer regresar con Raquel.
Esta mujer perdió la tutela de sus hijos el 19 de agosto de 2014. El motivo: una denuncia de sus propios padres ante los Servicios Sociales. Una década después sigue luchando por recuperarla. "Protección de menores tanto a mis hijos como a mí me llevan todo este tiempo maltratando psicológicamente", subraya.
El suceso que originó todo
El pasado miércoles fue protagonista de un nuevo episodio. Su hijo, de 15 años, se escapó de casa de sus abuelos maternos, que son sus acogedores, y llamó al timbre de su casa. Tenía un ataque de "ansiedad", ya que "estaba harto" de la situación. Raquel cuenta con un régimen de visitas de una hora al mes bajo supervisión de los técnicos, según relata ella misma en la comparecencia que tuvo ante la Guardia Civil en calidad de denunciada.
Esta mujer explicó que desde octubre de 2023 no ha tenido contacto con su hijo y que fue a su domicilio porque, según él manifestó, no quiere vivir con sus abuelos. Raquel alegó que dejó pasar al menor a su casa porque temía que se pudiera fugar pero llamó de forma inmediata a los agentes de la Guardia Civil de Sevilla para que acudieran a su casa.
La denuncia de la madre
El menor incluso llegó a redactar un impreso en la Consejería de Igualdad y Políticas Sociales de la Junta de Andalucía donde explicaba su situación. Alegaba que estaba en contra de su voluntad en la casa de sus abuelos y que era "totalmente infeliz". Su único objetivo era el de regresar con su madre que es la única persona con la que quiere vivir.
Después de todo esto, Raquel decidió este lunes acudir a la Guardia Civil para comparecer en calidad de denunciante. Manifestó a los agentes que la vivienda donde están sus hijos "acumula basura por todos sus habitáculos, así como ropa y desorden total". Sin "medidas higiénicas corrientes".
Esta mujer tomó la decisión a pesar de comunicar de forma reiterada por "escrito y por teléfono" a los Servicios Sociales toda la situación. "No pueden vivir en esas condiciones", añadió a los funcionarios de la Guardia Civil en Sevilla, en el momento en el que puso la denuncia sobre el problema que viven los menores.
La petición del menor
Para corroborar esta versión, Raquel solicitó a los agentes del Instituto Armado que tomaran el testimonio de su hijo, según la denuncia a la que ha tenido acceso Vozpópuli. Según ella relata el menor pide de forma constante al juez que le devuelva la custodia. "Está harto de solicitarlo y protección de menores y nadie le hace caso", atestigua.
La abuela materna del menor fue la que denunció la fuga del adolescente a casa de su madre, según relata Raquel. Afirma que es el protocolo habitual en este tipo de casos. La Guardia Civil que es la que maneja las dos denuncias tendrá que hacer un atestado con base a las dos denuncias que se han presentado. Para ello se tomará el testimonio de las dos partes indicadas y también se podría pedir informes a los Servicios Sociales para aclarar las circunstancias del menor.
