Un spray de defensa personal de un litro y una katana de grandes dimensiones. Estos son los dos elementos nuevos con los que cuenta la Guardia Civil para detener al autor del envenenamiento mortal de un narco rumano en Cádiz. Este hombre, que trabajaba como conductor de VTC, tenía en el maletero de su coche este arma blanca de grandes dimensiones, según informan fuentes del caso a Vozpópuli.
La víctima es un hombre que tenía antecedentes por narcotráfico aunque su última detención por drogas se remonta al 2006. Recientemente había sido arrestado por un delito de violencia de género pero también por otro individuo.
Y es que hace poco más de un mes, un varón denunció a la víctima por un delito de lesiones. Fuentes de la investigación aseguran a Vozpópuli que tras una pelea intentó atropellarle con su vehículo. Se busca a este hombre para que proporcione un testimonio por estos hechos.
La Guardia Civil recibió el aviso de este suceso durante la madrugada del pasado viernes. Una vecina vio como se precipitaba este narco rumano desde la azotea de la Urbanización Links fase 2 de la Alcaldesa- San Roque.
Un spray de un litro con potasio
Cuando llegaron los agentes observaron a esta persona en posición de cubito supino. Tenía un chaleco antibalas de color blanco abrochado y no respondía a las preguntas. Tras una batida por los alrededores, los funcionarios localizaron un bote de spray de defensa personal de gran tamaño. Su principal ingrediente es el potasio. En concreto era de un litro de capacidad.
En el garaje, localizaron un Tesla que tenía en su interior una katana de grandes dimensiones. El narco rumano fue trasladado al Hospital de la Línea de la Concepción, donde los servicios médicos informaron que el individuo no presentaba lesiones compatibles con una precipitación. No obstante, los sanitarios señalaron a los agentes que había indicios de "haber sido envenenado con una elevada dosis de algún tipo de sustancia (posiblemente potasio)". La victima permaneció dos horas en la UCI del hospital pero murió.
El perfil del antiguo narco
El papel de la víctima dentro de estas organizaciones criminales no está claro. No estaba fichado como uno de los miembros de las grandes familias que trabajan con los narcos de la zona. Esta circunstancia invita a pensar a los agentes de la Guardia Civil que llevaba poco tiempo en Cádiz o que su puesto era de intermediario de otros negocios.
Sea como fuere todas las hipótesis están abierta y la clave que esperan los investigadores en estos momentos es el resultado de la autopsia del narco rumano. Este informe determinará ante qué nos encontramos. Si un homicidio que se ha ido cocinando a fuego lento o un accidente. Este caso supone un auténtico reto para los laboriosos funcionarios de PJ de Algeciras que trabajan con gran hermetismo para resolver este suceso.