Los bomberos de Murcia intervinieron la madrugada del pasado sábado en otro local de Atalayas (Murcia) al arder un cuadro de contadores, situado en el exterior del establecimiento, 35 días después del trágico incendio en el que murieron trece personas en las discotecas Teatre y Fonda Milagros.
Según fuentes municipales, el incidente se produjo a las dos de la madrugada, cuando la Policía y los Bomberos recibieron una llamada por parte de los encargados del local advirtiendo de que salía humo de un cuadro de contadores de electricidad, en el lateral de la calle Ceutí.
Según La Opinión, la integridad de los clientes del local no se puso en peligro a pesar de la gran cantidad de chispas y humo que se generó. Los técnicos de la compañía eléctrica y después de que ser resolviera la avería, una hora y media después de que se produjera el desalojo, el local volvió a abrir con total normalidad tras la hora de cierre.
Tras solucionar la incidencia, se ordenó que la discoteca permanezca cerrada hasta que se revisen las instalaciones eléctricas del local.
Un nuevo incendio en otra discoteca murciana
Al menos trece personas fallecieron y cuatro resultaron heridas en el incendio que se registró el pasado 1 de octubre sobre las seis de la mañana en la discoteca Fonda Milagros de Murcia. El fuego se terminó extendiendo a otros dos locales de la zona de ocio de Las Atalayas, concretamente en las discotecas Teatre y Golden. Las naves incendiadas se tuvieron que apuntalar para garantizar la seguridad de los servicios de emergencia mientras tomaban las muestras de ADN.
El balance de víctimas mortales fue escalando conforme iba avanzando el día. Se tuvo que instalar un equipo de psicólogos en el Palacio de los Deportes para atender a todos los familiares y amigos de las víctimas. Entre ello se encontraba el padre de la joven que envió a su madre un audio de despedida: "Mami, la amo, voy a morir", un desgarrador mensaje que grabó la joven y que su padre trasladó a los medios de comunicación.
La mayor tragedia en una discoteca tuvo lugar en Madrid el 17 de diciembre de 1983, cuando un incendio originado tras las cortinas del escenario de la discoteca Alcalá 20 acabó con la vida de 81 personas, la mayoría jóvenes.